Yo hacía una divina labor, sobre la
roca
Creciente del Orgullo. De la vida lejana,
Algún pétalo vivido me voló en la mañana,
Algún beso en la
noche. Tenaz como una loca,
Seguía mi divina labor de roca,
Cuando tu voz que funde como sacra
campana
En la nota celeste la vibración humana,
Tendió su lazo de oro al borde de tu boca;
... (ver texto completo)