Sale de la
plaza Mayor y llega hasta los portales de la antigua
muralla. Recibe su nombre por un gobernante enérgico y gran guerrero al cual llamaban Conde Tallaferro.
La
casa que se ve es Can Figueres conocida también como Can Goita. La planta baja se levanta sobre unas arcadas de
arcos rebajados que reposan sobre
columnas y
capiteles octogonales y otra arcada transversal única con un
arco de medio punto. Una cornisa separa la planta baja del primer piso. En el primer piso hay unas
ventanas tríforas, divididas por dos pequeñas columnas con capiteles góticos sobre las que descansan tres arcos redondos.