historia
La primera noticia histórica sobre
Espinelves es del año 943, época en la que había una
iglesia y
parroquia en funcionamiento, dedicada a
San Vicente, y al parecer, se encontraba en una villa o gran explotación rural llamada Espinelves.
El nombre de Espinelves parece derivar de Espinas
amaneceres, es decir, Espinas blancas.
El
pueblo de Espinelves va a
caballo de la historia de la iglesia. Es uno de los pocos
pueblos del
románico que aún se conservan en
Cataluña, y donde podemos encontrar piezas únicas del
arte de aquella época y en un perfecto estado de conservación
La silueta del
campanario de la iglesia
románica da una fisonomía inconfundible al pueblo, que subido a la izquierda del arroyo nos presenta pequeño y acogedor. La localidad ha guardado con cuidado un aspecto limpio y agradable, con las
casas de estructura de
piedra, las
calles pavimentadas con losas y las edificaciones más modernas que armonizan con el conjunto. La historia de Espinelves gira alrededor de su iglesia: San Vicente d'Espinelves. Original del siglo XI-XII, fue ampliada con una segunda nave y
ábside al S. XVII
En el interior conserva el portal primitivo, trasladado en parte a la nave añadida en el siglo XII. El actual portal presenta un ábaco trabajado, dos
capiteles con figura humana y hojas, y dos
ábsides con arquerías.
Cabe destacar su magnífico campanario de planta cuadrada, de tres pisos, con
ventanas gemelas y capiteles trapezoidales, y también la
Virgen, del siglo XV, dedicada al Rosario.
El
retablo del llamado maestro de Espinelves es actualmente el
Museo Episcopal de Vic. Hace pocos años fue objeto de una cuidadosa restauración
Un
castillo Espinelves?
Los primitivos términos parroquiales estaban adscritos o asignados a uno de los grandes términos de los
castillos con que se repartió el país es del momento de su restauración por el conde Wifredo el Velloso, a partir de 879. El término de Espinelves estaba adscrito al territorio del castillo de San Lorenzo y luego, al de Meda.
Un documento de 1133 nos dice claramente que se edificó en el Puig de Castellar de Espinelves una fortaleza con su castillo y vivienda, que el caballero Bertran de Merola, con su esposa Beatriz y sus hijos cedieron a Pedro Udalard de Sentfores.
Se trataba de un castillo secundario, sometido al de Meda, pero que contaba con derechos propios y edificaciones de las que forzosamente ha quedado rastro. Desaparecería muy pronto pues no se habla nunca de él en la documentación a partir de los siglos XIII y XIV.
Los Masos y la Jurisdicción de Espinelves
Durante muchos siglos Espinelves ha sido un término eminentemente rural, había algunas contadas asnos y sagrers entorno de la iglesia del siglo XIII, pero con el despoblamiento del siglo XIV el término se volvió eminentemente rural, sólo con un censo de una doces de
familias.
Conocemos las noticias más antiguas sobre las masías gracias a la domcumentació de Sant Llorenç del Munt. Los priores de San Lorenzo poseían en 1337 varios
caseríos de Espinelves. Se puede decir que el prior de Sant Llorenç del Munt pasó a ser el señor efectivo del término. Según un fogaje del siglo XIV, en estos tiempos, en pleno despoblación, la parroquia de Espinelves tenía 11 familias, todas ellas de dominio eclesiástico.
En cambio, la jurisdicción de la justicia del lugar pasó a manos de los vizcondes de
Cabrera, creados condes de Osona, en 1356, cuando el rey le dio todos los derechos reales de Osona.
A finales del siglo XV Espinelves había unido en Sant Sadurní d'Osomort y los dos lugares formaban una sola alcaldía.
A principios del siglo XIX se hizo la división provisional de Cataluña en provincias. Espinelves se vio directamente afectada en este momento ya que se incluyó en la provincia de Girnai el partido judicial de Snta Colo de Farnesio, rompiendo así su tradicional adscripción a la veguería y luego al corregimiento de Vic.
El estancamiento de la población en la primera mitad del siglo XX y el fuerte descenso de los últimos años se deben a la falta de medios de vida que ofrece la población, sobre todo por la
juventud.