BREVE
HISTORIA DE
RAIMAT
El
pueblo de Raimat propiamente dicho es muy
joven, muy pronto hará 100 años de su nuevo " redescubrimiento " a partir del año 1914, cuando la
familia Raventós adquirió estas tierras.
Por lo menos, hay que mencionar que se tienen evidencias y restos encontrados en varios yacimientos que Raimat era muy cerca de la
vía romana que iba de Ilerda en
Huesca, y era considerado un lugar inmejorable para construir una villa de tipo residencial.
El año 1149 fue reconquistado por el conde de
Barcelona, Ramón Berenguer IV, y en los primeros documentos que se conocen aparece escrito el nombre del pueblo con su grafismo y toponimia que nos indica el origen arábigo rasm, RAIXMAT o Rachmat.
El
Castillo de Raimat y su "
cueva " nos indican que el Raimat los sarracenos era considerado un pueblo agrícola con varios elementos defensivos y que tenía una población estable que al propio tiempo gozaba de una mezquita.
Es en esta época cuando aparece como primer señor de Raimat el destacado caballero Guerau de Jorba que recibió de manos del conde de Barcelona.
A partir de este momento histórico se producen una serie de transacciones, testamentos, cesiones en los que se venderá y comprará el Castillo y el término infinidad de veces.
Hablando de habitantes el censo más antiguo de nuestra población, fecha de 1365, con 64 fuegos (fuego = hogar o vivienda) el segundo pueblo más grande, después de
Alcarràs con 152 fuegos, por lo tanto se calcula que tenía entonces unos 256 pobladores aproximadamente.
Cuando se inició en 1642 la Guerra del Segadors, y después de muchos años de lucha y penurias, Raimat quedó completamente despoblado. Por lo menos, el símbolo del pueblo, El Castillo, quedará siempre como referente. Se pues al 1715 y terminada la Guerra de Sucesión cuando los Canónigos de Lleida se decidieron a recuperar el Castillo e hicieron obras de restauración durante tres años, con la intención final de repoblar el término, aunque esto luego no fue posible.
Raimat fue, lamentablemente, un lugar donde se entregaron muchos combates y duras batallas para que Lleida era la
puerta de entrada a
Cataluña y se abría siempre el paso a todas las tropas enfrentadas y fue zona y escenario de diferentes sitios.
Así permaneció casi despoblado 270 años (1644 hasta 1914) hasta que la
finca y el Castillo fue adquirida en 1914 por el Sr.. Manuel Raventós Domenech que la compró a una familia aragonesa que arrendaba la finca o término, como coto de
caza.
En 1863 se inauguró la
estación de
tren de
Almacelles y por tanto Raimat ya estaba comunicado, pero la obra capital para estas tierras será la construcción del
Canal de
Aragón y Cataluña (1896 a 1910) y en 1910 el
agua llegaba a Almacelles y Raimat. El 4 de Marzo de 1906 visita las tierras de Lleida el rey Alfonso XIII y bajó a nuestra la estación, donde anunció la subasta del último tramo de Canal y visitó las obras que se hacían en el pueblo.
Así pues ya tenía todos los condicionantes óptimos para volver a resurgir con toda la fuerza. A partir del empuje y visión de futuro del Sr. Raventós, estas tierras baldías e improductivas se produjo una transformación espectacular. Fueron muchos años de ardua labor para reconvertir lo que era un param desértico en una zona donde ya se podía vislumbrar que sería un lugar como el que habían soñado los antiguos
romanos, una villa o pueblo residencial rodeado de cultivos magníficamente adaptados y muy cerca de la capital, Lleida.
Cabe añadir que para conseguir este "milagro " llamado Raimat aparte del entusiasmo y determinación de toda la familia Raventós continuadora del proyecto inicial del Sr.. Manuel Raventós, que en todas las etapas de transformación era necesario, como no, de la aportación de capital humano.
Así en Raimat llegaron para trabajar personal de todo el país, gerundenses, extremeños, gente del Penedès, ingenieros y técnicos profesionales para aportar sus conocimientos en los diferentes ámbitos de cultivos y cultivos. También además se abastecía de un importante contingente de jornaleros que venían de los
pueblos vecinos, sobre todo de Alpicat y Almacelles, finalmente también y más adelante, llegaron gente de
Andalucía y Aragón, que conformaron el núcleo inicial del pueblo.
Se empezaron a construir las primeras
casas para los trabajadores recién llegados que se situaron en la
Calle Hormigón, Norte y Ronda y también se reconvierte, la Calle Estación en zona muy activa, talleres,
tiendas, viviendas etc.. También entre 1918 y 1920 se construyó la actual
Iglesia y el
Convento de las Monjas, y al mismo tiempo se levantó un
edificio que era conocido como la
Fonda, (ahora demolido) que primero fue una Cooperativa y poco después se reconvertir con lo que hoy le llamaríamos una construcción " polivalente " donde se realizaban múltiples actividades,
bar, fonda,
colegio,
consultorio médico, sala de
cine y
baile,
teatro,
fiestas de
Navidad y Reyes, fiestas Mayores, conciertos, etc. Se la década de los 50 cuando se empezó a urbanizar la Calle
Virgen de Montserrat, y el nuevo edificio de las
Escuelas Públicas en el año 54. Por lo menos, se los años 60 cuando se produce un extraordinario salto urbanístico ampliando el núcleo con nuevas viviendas y varias
calles, todos ellos circunvalando el
campo de
fútbol, ​​ centro neurálgico del pueblo. En 1970 se inaugura el complejo lúdico -deportivo de las
Piscinas con una generosa y amplia zona verde.
El Plan General de Urbanismo de Lleida, en la década de los 80 propició la aparición del proyecto de urbanización cerca de la misma zona, núcleo de parcelas en forma triangular, delimitado por el canal y la actual calle del Tempranillo, destinadas la construcción de viviendas aisladas y chalets.
Finalmente el último Plan General de Lleida 1999 ya previó una nueva zona de expansión urbanística ubicada en un lugar llamado "La Valleta ", situada al este de la población, entre el Castillo y la vía férrea.
Actualmente Raimat tiene un núcleo de población estable y con un crecimiento de baja intensidad que lo caracteriza por su tranquilidad y una calidad de vida extraordinaria de todos sus habitantes.
En el año 2003 nuestro pueblo se constituyó como entidad municipal descentralizada dependiente de La Paeria de Lleida, consiguiendo una de las metas más anheladas por todo el vecindario