Muñoz, tengo que estar de acuerdo contigo en algunas cosas y en tu contra en otras.
Está claro, todos sabemos que con algunas de esas bestias pardas no se puede hacer nada, no se les puede corregir. Pero hay otros que si, y de eso se trata. Igual que en su momento hubo una escisión de los poli-milis, con su renuncia a las armas, creo que ahora, con la negociación se podría haber llegado a algo parecido. El problema es difícil de solucionar, eso nadie lo duda. Llevan muchos años acostumbrados a vivir del miedo y la extorsión, a no dar un palo al agua, y el abandono de las armas conllevaría trabajar, y eso les iba a costar mucho. Pero creo que la sociedad vasca está muy harta de no poder vivir en libertad. Hasta gran parte de los independentistas más absolutos no desean más derramamiento de sangre, y por ahí hay que entrar. Y sólo se puede hacer negociando, llegando a acercar posturas, para que la gran mayoría aísle a esos que no quieren dejarlo, que se vean solos y sin respaldo. La vía policial es importante y ha dado sus frutos, pero con ella llevamos 40 años y no se ve el fin del túnel. Y el gobierno de un país tiene la obligación de intentarlo. Y si hay otro partido que olvidando que también lo hizo en su momento centra su oposición en criticar la negociación, haya ellos y su conciencia. Zapatero hizo bien en intentarlo. No se pudo, mala suerte, pero en el momento que haya nuevos atentados, que los habrá, los familiares de las nuevas víctimas no podrán reprochar a su presidente el no haber intentado una solución. De otros que se ponen medallas no sé si se podrá decir lo mismo.
Me hace mucha gracia la utilización que desde la derecha se hace estos días el décimo aniversario del asesinato de M. A. Blanco. Terrible suceso que nos emocionó a todos y nos hizo ver que esos animales no tienen sentimientos. Pero este aniversario también hace resaltar la hipocresía del PP. En el año 98, con el cadáver de Blanco todavía caliente, el PP negoció con ETA, Ansar pronunció lo del MNLV, pidió generosidad y comprensión a los españoles para que respaldaran su negociación y comenzó a acercar y a soltar presos de ETA. Pero ahora se les olvida y vuelven a sacar el cadáver como arma arrojadiza contra los socialistas, como si tuvieran ellos la culpa de tan horrible suceso. Una vergüenza, ¿o no?
Bnb.
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Está claro, todos sabemos que con algunas de esas bestias pardas no se puede hacer nada, no se les puede corregir. Pero hay otros que si, y de eso se trata. Igual que en su momento hubo una escisión de los poli-milis, con su renuncia a las armas, creo que ahora, con la negociación se podría haber llegado a algo parecido. El problema es difícil de solucionar, eso nadie lo duda. Llevan muchos años acostumbrados a vivir del miedo y la extorsión, a no dar un palo al agua, y el abandono de las armas conllevaría trabajar, y eso les iba a costar mucho. Pero creo que la sociedad vasca está muy harta de no poder vivir en libertad. Hasta gran parte de los independentistas más absolutos no desean más derramamiento de sangre, y por ahí hay que entrar. Y sólo se puede hacer negociando, llegando a acercar posturas, para que la gran mayoría aísle a esos que no quieren dejarlo, que se vean solos y sin respaldo. La vía policial es importante y ha dado sus frutos, pero con ella llevamos 40 años y no se ve el fin del túnel. Y el gobierno de un país tiene la obligación de intentarlo. Y si hay otro partido que olvidando que también lo hizo en su momento centra su oposición en criticar la negociación, haya ellos y su conciencia. Zapatero hizo bien en intentarlo. No se pudo, mala suerte, pero en el momento que haya nuevos atentados, que los habrá, los familiares de las nuevas víctimas no podrán reprochar a su presidente el no haber intentado una solución. De otros que se ponen medallas no sé si se podrá decir lo mismo.
Me hace mucha gracia la utilización que desde la derecha se hace estos días el décimo aniversario del asesinato de M. A. Blanco. Terrible suceso que nos emocionó a todos y nos hizo ver que esos animales no tienen sentimientos. Pero este aniversario también hace resaltar la hipocresía del PP. En el año 98, con el cadáver de Blanco todavía caliente, el PP negoció con ETA, Ansar pronunció lo del MNLV, pidió generosidad y comprensión a los españoles para que respaldaran su negociación y comenzó a acercar y a soltar presos de ETA. Pero ahora se les olvida y vuelven a sacar el cadáver como arma arrojadiza contra los socialistas, como si tuvieran ellos la culpa de tan horrible suceso. Una vergüenza, ¿o no?
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