De Wikipedia: Se han encontrado restos paleolíticos y neoliticos en las
cuevas de Daniel y el Bec de la gallina, y también piezas de sílex cerca del
pueblo. Por otro lado, hay restos de muelas de
molino,
cerámicas y monedas ibéricas e ilercetanas del siglo II. En La partida de Las Planas se han encontrado restos de una villa
romana, monedas de los siglos II y III y una necrópilis de era visigoda en el
camino de Mas del Dineral.
En tiempos de los sarracenos, dependía de Siurana. Su población aumenta en el siglo XI debido a la llegada de sarracenos huidos de la Reconquista. La caída definitiva del
castillo árabe de Siurana, centro neurálgico de este territorio, se logró entre 1153 y 1154 con la intervención de cuatro ejercidos cristianos dirigidos por los nobles catalanes Hug Ponç y Ramon de Cervera que entraron en
Rojals,
Farena y
Capafonts el año 1151.6 Ese año, el
valle del Brugent pasa a manos del conde de
Barcelona y empiezan a llegar cristianos a repoblar Siurana, hasta que Capafontes aparece citado en la carta de población de
Prades de 1159.
A partir del siglo XIV, Capafonts pertenece al condado de Prades, creado en 1324 por Jaime II de
Aragón en favor de su hijo Ramón Berenguer de Aragón. Tras la cuarta generación, pasa a ser gobernado por la
casa de Cardona. En 1564, vuelve a la de Aragón y, en 1575, a la casa de los Fernández de
Córdoba, condes de Ampurias y de Prades, hasta que por matrimonio se añade al título el de los duques de Medinacelli y más tarde el de los duques de
Feria, hasta la actualidad, en que el condado de Prades pertenece a Victoria von Hohenlohe-Langenburg, nacida en
Málaga en 1997 y que acumula más de 40 títulos de la nobleza española, entre ellos duquesa de Medinacelli.
Durante los siglos XVI y XVII, las
montañas de Prades estuvieron afectadas por el bandolerismo, como gran parte de
Cataluña, por lo que se crearon hermandades que proporcionaban guardias que se apostaban en los
caminos para protegerlos. Muchos de los bandoleros eran moriscos que se habían refugiado en las montañas, marginados por el resto de la población. El duque de Cardona y conde de Prades, entonces Francisco de Aragón y Cardona, proporcionó 300 hombres para luchar contra los bandoleros en 1569. La situación pudo empeorar cuando se proclamó el decreto de expulsión de Felipe III entre 1609 y 1613.
Durante la Guerra dels Segadors o Sublevación de Cataluña, entre 1640 y 1652, el condado de Prades apoyó a las tropas franco-catalanas. Tras la derrota, que hizo derribar numerosas
murallas, como en Prades, siguió en manos de los duques de Medinacelli hasta la desamortización de Mendizabal.
En 1724, Capafonts se encuentra entre las poblaciones afectadas por una epidemia de paludismo en tierras de
Tarragona. 7
La entrada de los franceses en
España durante la invasión napoleónica fuerza la creación de milicias formadas por migueletes. Los municipios de las montañas de Prades aportan 44 hombres al segundo tercio de migueletes, de los que, en 1808, 5 son de Capafonts. En 1820, Capafons debe aportar a las tropas unas 24 arrobas (275 kilos) semanales de trigo. Entre 1810 y 1814, los franceses ocupan la región y entonces las peticiones aumentan. Capafonts debe aportar al ejñercito acuartelado en Reus 24 arrobas de paja, 24 de leña, 20 raciones de
pan y 3 quartans (unos 17 litros) de aceite. Las cantidades van subiendo hacia 1813 para abastecer a los húsares franceses de Reus. En la comarca, muere más gente por epidemias que por disparos. Acabada la guerra en 1814 se dictan normas para que la gente vuelva a sus
pueblos y evitar saqueos en tierras ajenas. 8
Durante la tercera guerra carlista, surge la figura del Niño de Prades, que había aprendido las artes de la guerrilla con las tropas del teniente coronel José B. Moore con solo 17 años, y que, hacia 1874, con 19 años, tras la retirada carlista de esta zona, formó un grupo guerrillero que actuó por tierras de Prades, saqueando pueblos, incluido Capafonts, hasta su muerte en 1875.910
Algunos nombres conocidos de Capafonts pertenecen a las
familias que poseyeron más tierras en el pueblo, como Balaña i Pocurull, que figuran en las listas de los represaliados durante la guerra civil española. 11 Según algunos testimonios, en Capafonts estaban los del POUM. En 1941 fueron llamados a filas los nacidos en 1921, que eran seis en el pueblo, para ir a la batalla del Ebro. Entre los apellidos, Barberà, Balañà, Besora, Pocurull, Fort. A la vuelta, hubo que enterrar a los muertos que estaban escampados alrededor del pueblo