Desde el
puerto hacia el sur, el agradable y acogedor
paseo marítimo comienza con una breve zona peatonal y se estira luego por varias pequeñas
playas entre espigones, sombreadas arboledas, pequeños
restaurantes y hermosas residencias marítimas. Magnífico escenario para el descanso, la charla amistosa y el ejercicio físico sin penosas exigencias.