Virgen del Val patrona, se desconoce el aspecto que tuvo la primera
capilla. Más tarde, en 1376, por orden del arzobispo de
Toledo, Pedro Tenorio se edificó sobre la anterior otra
ermita, esta vez en estilo
gótico. Este templo se mantuvo en pie hasta la Guerra de la Independencia, cuando fue saqueada e incendiada. En 1926 se volvió a construir en los estilos neogótico y neomudéjar ya definitivamente, sobre un proyecto inicial del arquitecto municipal Martín Pastells y Papell y un diseño definitivo, más modesto, del también arquitecto municipal José de Azpíroz y Azpíroz. Esta última edificación es la que se conserva actualmente.