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Estoy de acuerdo, ciérrese para siempre este capítulo sangriento de la historia de España, pero no seamos tan equidistantes juzgando como iguales a los dos bandos que lucharon en la guerra civil española, porque si no lo que estaremos haciendo es mintiendo. Si te apasiona la Historia estarás conmigo en que hay que recordar que quien se rebeló contra el imperfecto régimen republicano y quien provocó una guerra civil en España fueron los militares africanistas capitaneados por Franco, aquel 18 de julio de 1936, con las simpatías y el apoyo de la Iglesia y los terratenientes, agraviados que se sentían por las medidas de reforma del gobierno republicano. Podemos discutir sobre la oportunidad y el calendario de las reformas republicanas, pero no de su necesidad, ni tampoco del odio que tales medidas despertaron en los que durante tanto tiempo había detentado el poder y el privilegio.
Y también hay que recordar que una vez terminada la guerra, los "victoriosos" siguieron matando a placer y con el consentimiento eclesiástico, a miles de españoles, por no hablar de la falta de libertades que sufrimos y todavía estamos pagando. Seamos ecuánimes, si, pero contemos toda la verdad, la profusa documentación existente sobre el tema y la bibliografía del estado de la cuestión demuestra sin lugar a dudas la criminalidad del régimen nacido de la guerra civil que ellos mismos provocaron. Lo único que conseguimos con querer ser tan equidistantes es absolver a los culpables de los crímenes de guerra del bando nacionalista y de la represión de después de la guerra, que nunca fueron castigados, y ya no lo serán. Un verdadero historiador no puede contar una historia de España que no lo cuente todo, sólo nos faltaría eso, fabricar una Historia falsa que se consolide como la verdadera a estas alturas de nuestra Historia, valga la redundancia, ¿de qué tenemos miedo? ¿Tal vez de que estén volviendo al poder algunos de sus herederos?
Y también hay que recordar que una vez terminada la guerra, los "victoriosos" siguieron matando a placer y con el consentimiento eclesiástico, a miles de españoles, por no hablar de la falta de libertades que sufrimos y todavía estamos pagando. Seamos ecuánimes, si, pero contemos toda la verdad, la profusa documentación existente sobre el tema y la bibliografía del estado de la cuestión demuestra sin lugar a dudas la criminalidad del régimen nacido de la guerra civil que ellos mismos provocaron. Lo único que conseguimos con querer ser tan equidistantes es absolver a los culpables de los crímenes de guerra del bando nacionalista y de la represión de después de la guerra, que nunca fueron castigados, y ya no lo serán. Un verdadero historiador no puede contar una historia de España que no lo cuente todo, sólo nos faltaría eso, fabricar una Historia falsa que se consolide como la verdadera a estas alturas de nuestra Historia, valga la redundancia, ¿de qué tenemos miedo? ¿Tal vez de que estén volviendo al poder algunos de sus herederos?
