De los siete pueblos madrileños con vistas al río Tajuña, Ambite es el más pequeño. No por ello pierde el encanto ni las características de sus vecinos. Es más, se diría que es el único que aún no ha sufrido el acoso de las urbanizaciones. Tampoco se han construido edificios industriales que rompan el paisaje de los alrededores, o viviendas típicas de barrios periféricos de la capital...
Las calles del pueblo se recorren en un paseo agradable a pesar de las empinadas e inevitables cuestas....