LEYENDA DE PEDRO CHIVO
Situado en
Alcalá de Henares, a mediados de la edad moderna; Pedro cruzaba aquella tarde de
invierno una vez más las tierras de
Anchuelo montado en su
caballo blanco; Tenia 27 años, piel clara, pelo rubio, labios gruesos y complexión normal. Su amada novia le esperaba en la ciudad de Pizna (después
Pioz).
Aquel dia importante y delicado para ambos, decidirían la fecha de la
boda y definitivamente el lugar de residencia. Irene, pegada intensamente a su padre, se cegaba queriendo residir en Pzna. Intentaba con muchas dificultades entender la necesidad de morar en Alcalá, pero no lo conseguía. Pedro dueño de un telar ubicado en dicha ciudad, no podía por tal negocio acceder a esta petición basada únicamente en la pasión de la hija por el padre; o quien sabe si por falta de un verdadero amor.
Hablaron acaloradamente durante horas, pero lo único que consiguieron fue discutir para terminar ultrajándose. De esta guisa la dama injuriada maldijo a Pedro: ¡Quiera el
cielo que te mates hoy con el caballo y te salgan cuernos como a los chivos! . De regreso un rayo asusto al equino y así ocurrió. Aunque nadie sabe con certeza si fueron cuernos lo que le salieron o dos hermosos chichones que en semejantes partes le aparecieron antes de morir debido al porrazo que se pego.
En tal sitio pusieron una
columna con una
cruz para recordar tal suceso.
(En la actualidad solo existe la columna)
Así pasó esta leyenda,
Que ocurrió en este lugar,
a media legua de Anchuelo
y a unas cuantas de Alcalá
(LEYENDA RESUMIDA)
)