Por cierto, si alguien busca ese
cartel, lo encontrará actualmente destrozado y medio quemado. En fin,
Aranjuez es muy bonito y es un
pueblo de buena gente, pero gracias a los 4 cafres de siempre, estamos siempre como estamos, sucios y hechos una porquería. Hay ciudades que teniendo 1000 veces menos cosas que aranjuez, las potencian y las saben vender como lo mejor, y aquì, que tenemos un conjunto
monumental y natural único en el mundo, nos dedicamos a destrozarlo. ¡QUE PENA!