Se trata de un conjunto escultórico exento realizado en mármol blanco, compuesto por una figura humana, un
joven de complexión atlética, y un felino, posiblemente una pantera. La figura humana tiene el pie izquierdo adelantado y el torso girado ligeramente también hacia la izquierda así como la cabeza, tocada con racimos de uvas que le caen por la espalda como si fuera el cabello. El brazo derecho se dobla llevando la mano a la altura del pecho que agarra un racimo de uvas. El brazo izquierdo por el contrario permanece extendido a lo largo del cuerpo y sujeta en la mano otro racimo de uvas. El felino se enrosca por detrás de la figura humana sentado sobre sus patas traseras, con la pata derecha delantera alzada para no pisar el racimo de uvas que se encuentra debajo, mientras, con la boca, intenta mordisquear las uvas que lleva en la mano izquierda la figura humana. Como dato curioso el sexo del joven queda oculto por una hoja de parra que proviene del racimo que sujeta con la mano izquierda.