Realizado con piedra caliza y mármol a finales del siglo II. Aranjuez (Madrid).
El Genio del Año favorece el ciclo de las estaciones y de las cosechas. Es una fuerza divina que engendra, produce y conserva todo lo que vive y evoluciona. Divinidad tutelar, protege la casa y a sus habitantes. La cornucopia, símbolo de prosperidad, es su atributo.