CHAMARTIN: Ser ferroviario, el poder de la memoria:...

Ser ferroviario, el poder de la memoria:
El ferrocarril no acaba cuando te jubilas, sigue corriendo por tus venas,
la cultura ferroviaria arrastra un
sentimiento que vives día a día para seguir trabajando y divulgando con los recuerdos  y vivencias, aquello que fue y seguirá siendo con sus avances tecnológicos en el tiempo, pero la esencia es y será  la misma, la comunicación del transporte entre territorios, bien sean mercancías o viajeros. Cambiará el estilo, pero el fin es el mismo de siempre, entre otros, el desarrollo económico de los pueblos y sus relaciones interculturales.

JJC