TARDES QUE MARCAN LEYENDAS.
Tardes frescas de la Sierra con el corazón vibrando, en el presente se encierra muchas. horas bien pensando... Paisajes llenos de vida con sus laderas gozosas, sendas que dan la salida a las miradas hermosas.. Tardes que dejan recuerdos de palabras encantadas, arrastrando vientos cuerdos que llevan frases guardadas. Esta Sierra madrileña que sabe de sus andadas, nos parece ser la dueña de canciones olvidadas.. Tardes con brisas despiertas qué tienen sendas marcadas, miradas ... (ver texto completo)

VIENTOS FRÍOS DE LA SIERRA. Vienen dejando sus brisas que te dejan constipado, las noches no tienen prisas y te dejan congelado. Noches de ráfagas frías sobre este campo endiablado, donde vuelan las porfías sin ver camino encantado. Las noches se van marchando con sonidos pasajeros, el viento viene dejando muchos ritmos trafulleros.. Estas noches tenebrosas donde la tormenta mece, no fueron horas dichosas mientras que la duda crece.. Noches que dejan lamentos sobre las piedras airosas, trazando los ... (ver texto completo)

AQUEL HOMBRE QUE CAMINANDO
Aquella tarde de agosto del año 2021, aquel hombre solitario duro y muy decidido, saliendo desde Hoyo de Manzanares quiso llegar al abismo, carretera de Colmenar Viejo, entre encinares perdidos, una carretera muerta de tiempos muy permitidos, giro sobre su derecha era un camino elegido, dicen que fue la Republica la que trazo su buen signo, para un lado queda El Pardo, a Cerceda el otro sentido, la llaman de La Republica, alguien de cerca me dijo. Los kilómetros pesaban ... (ver texto completo)

Sector del Pinar en las Rozas...

QUISO SUBIR AL PICAZO
Desde niño fue pensando como subir al Picazo, en Hoyo estuvo esperando, su edad sin frenar su plazo. En esa edad tan temprana donde los grillos se sienten, era dura la mañana con los vientos penitentes. La subida en un domingo, con su padre de la mano, sin pensar que es un castigo el escalar como humano. Quiso subir al Picazo y aquel día fue tremendo, las piedras son un zarpazo aunque subir fue sonriendo. Piedras en todas laderas, senderos que son inciertos, donde muchas primaveras ... (ver texto completo)

UN HOYO EN LAS FALDAS DE LA SIERRA
El Picazo va dejando sombras que arrastran los fríos,
La Tortuga está marcando sus eternos desvaríos.
Entre sombras penitentes que persiguen sus historias,
los pensamientos decentes siempre guardaron memorias.
En las sombras de la noche sientes vibrar las estrellas,
en el Hoyo no hay reproche y se ven las noches bellas.
El frío sigue esperando a las frías madrugadas,
el viento viene dejando muchas raras alboradas.
Casas de piedra labrada con sabor a ... (ver texto completo)

ACARICIANDO CABALLOS
Acariciando sus pelos
de una clic con su melena,
aquellos caballos fieros
si merecieron la pena,
Les hablé de ir galopando
por las sendas de la sierra,
me contestaron pensando
que les gustaba esa tierra.
Los dos caballos centrados ... (ver texto completo)

SIGO MIMANDO AL CABALLO
Le voy mimando al caballo
que se me acerca a la valla,
sin el temor de algún tallo
que pueda servir de tralla.
Una caricia con ritmo
de buscar la galopada,
el cementerio allí mismo
nos sirve de encrucijada.
Su mirada me acompaña ... (ver texto completo)

AQUELLA TORMENTA NOCTURNA
Aquella terrible tormenta de las tres de la madrugada, saliendo de la ciudad de Madrid, era tormenta visualizada, Por La Cuesta de las Perdices, las nubes se divisaban, y la lluvia tormentosa muy deprisa descargaba. Autovía peligrosa, cunetas casi llenadas, el agua siempre corriendo, la carretera cruzaba. Rayos dejando su fuerza, entre luces marginadas, el agua como un torrente corriendo por las calzadas. Un matrimonio impotente ante la cruel granizada, el automóvil patina ... (ver texto completo)

ANDANDO POR LA CABILDA
Aquel hombre jubilado, con sus ochenta años cumplidos, se le marchaba el cerebro sintiéndose deprimido. Entre sueños y leyendas quiso cambiar su destino, y se marchó por las sendas de tan sufrido camino. Una mañana de octubre con su corazón partido, agarro por la Cabilda que es un parque muy querido. Empezó subiendo piedras, sin reparar el destino, quiso ver a La Tortuga, que es en Hoyo muy temido. Con la mirada perdida, sin apenas soplar viento, iba mirando la cima que siempre ... (ver texto completo)

UN BURRO DESPERTADOR
Aquel burro respetado
por su flamante armonía,
era en Hoyo tan mimado
que nos gustó su alegría.
Las cinco de la mañana
siempre con su sinfonía,
sin ser su vida mundana
nos dejaba simpatía.
Despertador con verdades,
siempre alegrando la vida,
sus enormes soledades
pudieran darle una herida.
Desde mi cama escuchando
esa eterna melodía,
el rebuzno fue dejando
lo que El Picazo vivía.
Los jabalís protestando
unas barreras temidas,
los jardines destrozando
en sus enormes salidas.
El Burro sigue marcando
los pasajes de la vida,
muchos niños suspirando
vieron su noche querida.
Ya suena el despertador,
el rebuznar no te asusta,
un burro tan animador
a ninguno le disgusta.
A las cinco rebuznando,
entre piedras muy sentidas,
el burro sigue marcando
las madrugadas vividas.
Dejar al burro su vida,
que tenga sus herraduras,
quizá su senda perdida
este llena de diabluras.
G X Cantalapiedra. ... (ver texto completo)

CABALLO QUE SUBE A LA SIERRA
Con sus herraduras viejas y su clic lleno de brisa,
corre alegre ese caballo que nos deja su sonrisa,
Caballo que galopando sube a la sierra deprisa,
el viento le va ayudando sin ver que nada se eclipsa.
Hoy siento sus herraduras sobre las piedras pisando,
estas largas singladuras a veces las vas soñando.
El caballo sigue activo mientras marcha galopando,
es tan grande su motivo que yo le sigo admirando.
Caballo que va marcando su galopar altanero, ... (ver texto completo)

Ya sois dos urracas

NO BUSQUE PASIONES NUEVAS
La noche viene dejando
muchos sueños en espera,
la mente sigue pensando
ver pasiones a su vera.
Luces de sombras fantasmas
corren por las carreteras,
algunos ruidos reclaman
el no conocer barreras.
No busques nuevas pasiones, ... (ver texto completo)

AQUEL BURRO REBUZNABA
Donde se acaba El Picazo y las piedras son leyenda,
aquel burro fue zarpazo que nunca supo de rienda.
A las dos de la mañana cuando la gente dormía,
aquel burro rebuznaba con fuerza y melancolía,
Y siendo buen despertador a las cinco repetía,
lo comenta el dormilón pidiendo siempre armonía.
Sus rebuznos tienen huellas de ser un burro flautista,
que mirando las estrellas teme perder mucha vista.
Los silencios de la noche el burro los va rompiendo, ... (ver texto completo)