Su Iglesia del siglo XIV dedicada a San Andrés es la más bella joya arquitectónica con que cuenta la localidad. El artesonado geométricamente creado nos muestra la belleza de lo recto y lo simétrico. Descansan bajo este techo las imágenes hieráticas y admiradas con fe del Cristo de la Esperanza y de Ntra. Sra. Del Amor Hermoso.
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