Debe destacarse también su impresionante unidad de estilo y el haberse realizado en el reducido plazo para entonces de veintiún años. Los valores del proyecto son el orden, la jerarquización y la perfecta relación entre todas las partes de la composición, integrando monarquía, religión, ciencia y cultura en el eje principal: la
Portada Principal con la
estatua de
San Lorenzo, la
Biblioteca, los Reyes de Judá, la Basílica y el
Palacio privado del rey.