Palacio,
monasterio, basílica,
colegio, panteón...
El Escorial aúna todo esto en sus 2.000 estancias. Felipe II supervisó el proyecto y siguió de cerca su construcción. El 10 de agosto de 1557, las tropas de Felipe II vencían a los franceses en la batalla de
San Quintín. A raíz de la victoria, Felipe II había hecho público el propósito de levantar un monasterio en honor de san Lorenzo.