Si nos situamos en el centro del
patio frente a la entrada de la basílica, a nuestra izquierda en el
tejado, entre la octava y novena
ventana (contando desde la
iglesia), señalada con una
cruz grande y negra, podrás ver la última
piedra que se colocó en el
edificio. Fué fundada por Felipe II y está situada sobre el Zaguán del
pórtico de la
puerta principal. A su entrada podemos ver una inscripción que pone: Excomunión contra los que sacaren libros y algún objeto de la
biblioteca.