Palacio Real de
El Pardo.
Calle de Manuel Alonso, s/n. El Pardo.
Madrid.
El
monte del Pardo era apreciado como cazadero por los reyes de Castilla en el siglo XIV, y ya desde el XV existía aquí un pequeño
castillo, edificado por Enrique III y Enrique IV en el emplazamiento del palacio actual.
Carlos V ordenó su completa reedificación encargándosela a Luis de Vega, que realizó un pequeño alcázar tradicional español cuadrado con
torres sobresalientes en las
esquinas y todo rodeado por un foso, siguiendo el estilo plateresco castellano, como muestran la
portada principal y las galerías del
patio, donde los
escudos y emblemas evocan al Emperador.
El palacio fue terminado por Felipe II, que introduce aquí por primera vez las techumbres de pizarra a la flamenca, con altos caballetes y chapiteles, y que decora su interior al modo italiano con importantes frescos y con la galería de retratos, donde se reunían obras maestras de este género debidas a Tiziano, Antonio Moro y sus discípulos. Pero un incendio en 1604 destruyó completamente toda esa decoración salvo la sala de Gaspar Becerra en la
torre suroeste.
Felipe III encargó la reedificación a Francisco de Mora e intentó mantener el espíritu de su padre con abundante decoración al fresco, destacando entre los conservados los techos de Carducho y Cajés. A su vez, Felipe V alteró completamente el interior para poder albergar a toda la corte, puesto que vivía aquí tres meses de
invierno.
Por el mismo motivo Carlos III ordenó ampliar esta residencia, encargando a Sabatini que duplicase el palacio existente haciendo un patio igual (Borbones) al que ya existía (Austrias) y con otro más pequeño en medio para el paso de las carrozas.
Los Borbones, especialmente Felipe V y Carlos III, utilizaron este palacio sistemáticamente como residencia durante los meses de enero, febrero, marzo y parte de abril. De su uso invernal deriva el encargo de importantes series de tapices; bajo Carlos III, Goya, los Bayeu y otros pintores realizaron los modelos o cartones para estas tapicerías realizadas en la madrileña Real
Fábrica de
Santa Bárbara.
Carlos IV dejó de residir anualmente en El Pardo y mandó llevar a
San Lorenzo de el Escorial varias series de paños que quedan desde entonces desunidas. Fernando VII volvió a decorar el palacio con otras tapicerías.
El Palacio Real de El Pardo fue la residencia del general Francisco Franco, hasta 1975.
En la actualidad se destina a la visita turística, así como a residencia de los Jefes de Estado extranjeros de visita oficial en
España
Paseos por El Pardo.
El Pardo en la actualidad es un
barrio perteneciente al distrito de
Fuencarral-El Pardo, del municipio de Madrid. La localidad, fuera del casco urbano de la capital, fue anexionada a Madrid en 1950 perdiendo su categoría de municipio independiente. El antiguo
pueblo de Fuencarral, fue igualmente anexionado en aquella época por Madrid.
El actual distrito de Fuencarral-El Pardo, es el de mayor extensión de la capital contando con más de la cuarta parte de superficie del término municipal de la capital (el 26,4%). A su vez, la población de El Pardo, con 3443 habitantes en 2021, tiene la menor densidad de población de toda la capital.
Su proximidad con el núcleo urbano de Madrid y el ser su mayor pulmón lo posicionan como una de las localidades más deseadas para vivir al encontrarse completamente rodeado por el Monte de El Pardo.
La
historia de este núcleo de población comienza oficialmente en 1405, cuando el rey Enrique III de Castilla hizo construir la primera quinta de
caza en medio del Monte de El Pardo.
La mayor parte de su área (aproximadamente 15.100 hectáreas, el 94.4% de la superficie total) se encuentra cercada, mediante una valla que recorre su perímetro, a lo largo de 86 kilómetros. La visita a esta zona está totalmente prohibida. El rey Fernando VI fue quien mandó construir la tapia en el año 1753. Este muro tenía como misión impedir el furtivismo y a su vez evitar que los animales del coto escapasen.
A lo largo de su historia se han construido 32
puertas de entrada. Una de las pocas puertas que todavía existe es La
Puerta de Hierro. Fue construida en el siglo XVIII y señalaba el límite entre la capital y El Pardo. Hoy día está situada entre la M-30 y la
carretera de
la Coruña.
En las 900 hectáreas restantes (el 5,6%), sí es posible el acceso, a través de diferentes sendas y
caminos, habilitados a efectos recreativos.
El Monte de El Pardo limita al norte con los municipios de
Tres Cantos y
Colmenar Viejo, al noroeste con Hoyo de Manzanares y Torrelodones y al oeste con
Las Rozas. En los restantes puntos cardinales, la linde la marcan distintos
barrios de la capital, entre ellos los de Valverde (distrito Fuencarral-El Pardo) y el distrito Moncloa-Aravaca.