Seguramente sacara de la crisis al ayuntamiento de Griñón a base de mandar a la puerta del colegio La Salle a la policia local a la hora de salir para multar a los papas que van a recoger a sus hijos, al no haber aparcamiento se dejan los coches en el margen derecho de la calzada sin molestar absolutamente a nadie y ellos que lo saben aprovechan para denunciarlos. Es triste que no tenga nada mejor que hacer la policía local de Griñon que dedicarse a estos menesteres pero peor es saber que en otro colegio de pago del municipio, el Villa de Griñon tiene en la parte posterior una calle en la que se encuentra un Mercadonna con prohibición de aparcar en toda la calle con los bordillos incluso pintados de amarillo para señalizar la prohibición y por allí esta policía municipal no aparece para nada, los coches se suben incluso a las aceras y cortan el trafico, pero el porque allí no van? misterio sin resolver ¿o si?. No se trata de que multen a estos padres, pero a los otros tampoco.