EL ALTO DE LEÓN
Con las luces encendidas
la sierra tiene resorte,
hay viviendas escondidas
que cubren parte del monte.
En las noches más serenas
la vista se vuelve grande,
parecen romper las penas
sin ver el futuro en balde.
Entre Castilla y Madrid
el viento mueve molinos,
camino a Valladolid
se hacen más grandes los pinos.
El León de piedra dura
aguantando chaparrones,
que algunos llaman cultura
por historias y traiciones.
Ese León castellano
lleno de viejas leyendas,
dicen que parece humano
y camina por sus sendas.
La vieja casa de Hilario
tiene la ruina cantada,
el viento corre a diario
para alegrar la jornada.
Alto de muchos guerreros
que allí dejaron su vida,
pinares que son austeros
sabiendo de despedidas.
El Alto de los Leones
tiene historias medievales,
allí se ven sensaciones
de paisajes naturales.
Vientos del norte renacen
entre pinos madereros,
hay sueños que a veces nacen
con fríos del mes de Enero.
G X Cantalapiedra.
Con las luces encendidas
la sierra tiene resorte,
hay viviendas escondidas
que cubren parte del monte.
En las noches más serenas
la vista se vuelve grande,
parecen romper las penas
sin ver el futuro en balde.
Entre Castilla y Madrid
el viento mueve molinos,
camino a Valladolid
se hacen más grandes los pinos.
El León de piedra dura
aguantando chaparrones,
que algunos llaman cultura
por historias y traiciones.
Ese León castellano
lleno de viejas leyendas,
dicen que parece humano
y camina por sus sendas.
La vieja casa de Hilario
tiene la ruina cantada,
el viento corre a diario
para alegrar la jornada.
Alto de muchos guerreros
que allí dejaron su vida,
pinares que son austeros
sabiendo de despedidas.
El Alto de los Leones
tiene historias medievales,
allí se ven sensaciones
de paisajes naturales.
Vientos del norte renacen
entre pinos madereros,
hay sueños que a veces nacen
con fríos del mes de Enero.
G X Cantalapiedra.