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CAMINO DE GUADARRAMA
Vientos que corren la sierra
bajando por Guadarrama,
con olores de su tierra
que se envuelven en retama.
Pinos que son orgullosos
de resistir las nevadas,
son a veces caprichosos
cuando reciben heladas.
Camino de Guadarrama
entre luces soñadoras,
el pecho siempre se inflama
al ver felices las horas.
Praderas con sus ganados
que viven sus alegrías,
sueños que son enmarcados
en perfectas sintonías.
Aquel León de Castilla
que vigila Guadarrama,
echo de piedra sencilla
que hasta la nieve reclama.
El paisaje te emociona
con sus luces de colores,
y la vista selecciona
los sueños de mil amores.
Guadarrama en el camino
de esa sierra madrileña,
con laderas del buen pino
que siempre se ve risueña.
El viento corre celoso
con sus aires de primera,
Guadarrama es tan gozoso
que sueña la primavera.
Madrid mira al Guadarrama
para sentir sus caricias,
aquel paisaje se aclama
por ser viento de delicias.
G X Cantalapiedra.
Vientos que corren la sierra
bajando por Guadarrama,
con olores de su tierra
que se envuelven en retama.
Pinos que son orgullosos
de resistir las nevadas,
son a veces caprichosos
cuando reciben heladas.
Camino de Guadarrama
entre luces soñadoras,
el pecho siempre se inflama
al ver felices las horas.
Praderas con sus ganados
que viven sus alegrías,
sueños que son enmarcados
en perfectas sintonías.
Aquel León de Castilla
que vigila Guadarrama,
echo de piedra sencilla
que hasta la nieve reclama.
El paisaje te emociona
con sus luces de colores,
y la vista selecciona
los sueños de mil amores.
Guadarrama en el camino
de esa sierra madrileña,
con laderas del buen pino
que siempre se ve risueña.
El viento corre celoso
con sus aires de primera,
Guadarrama es tan gozoso
que sueña la primavera.
Madrid mira al Guadarrama
para sentir sus caricias,
aquel paisaje se aclama
por ser viento de delicias.
G X Cantalapiedra.