De todas formas, aunque éste árbol de la foto creciese solo, en Canillas hubo un "árbol de Felipe II" y el antiguo párroco, de. Juan, previamente asesorado desde 1967 por antiguos vecinos del pueblo, decía que donde está el arbol de la gasolinera, estuvo el antiguo. Probablemente el antiguo árbol estuviese aquí y después creciese éste y los vecinos de Canillas lo empezaron a considerar como un "sustituto" que recordaba al anterior. ¿por qué si no, se respetó misteriosamente éste árbol al hacer la gasolinera y se le puso ésa valla decorativa de ladrillo mientras que otros que estorbaban menos fueron talados o simplemente dejados en un cuadrado de tierra de la acera? Aunque éste no sea el árbol, el otro existió; y hoy en día puede tratarse a éste como un recuerdo del otro sin problemas, así se fomentaría que las leyendas de Canillas y otros pueblos que rodeaban Madrid, no se pierdan.