LLEGÓ A HOYO BUSCANDO PENSIÓN
Un hombre llegó buscando
una razón para siempre,
fue su cartera enseñando
como un vulgar delincuente.
Como si fuera un hidalgo
presumiendo de porfía,
incluso llevaba un galgo
para mostrar su valía.
No logrando su objetivo
fue presumiendo de todo,
sin conocer el motivo
vieron su ruta en el lodo.
Buscando piso o vivienda
fue reclamando derechos,
habló de tener la rienda
sobre los propios desechos.
La mañana fue perdida
por tan chulo caminante,
sin ver vivienda elegida
se fue camino adelante.
En Hoyo le comentaron,
no venga tan arrogante,
que muchos de aquí marcharon
viendo triste su semblante.
Aquel hombre con fanfarria,
nada supo de razones,
solo dijo que en La Alcarria
se habla de Torrelodones.
Sin humildad en sus gestos
la gente no le escuchaba,
y quiso sacar sus restos
al ver que nadie le hablaba.
Sin comprender sus palabras
se fue alejando con prisa,
no valen las cosas raras
ni querer comprar la brisa.
G X Cantalapiedra.
Un hombre llegó buscando
una razón para siempre,
fue su cartera enseñando
como un vulgar delincuente.
Como si fuera un hidalgo
presumiendo de porfía,
incluso llevaba un galgo
para mostrar su valía.
No logrando su objetivo
fue presumiendo de todo,
sin conocer el motivo
vieron su ruta en el lodo.
Buscando piso o vivienda
fue reclamando derechos,
habló de tener la rienda
sobre los propios desechos.
La mañana fue perdida
por tan chulo caminante,
sin ver vivienda elegida
se fue camino adelante.
En Hoyo le comentaron,
no venga tan arrogante,
que muchos de aquí marcharon
viendo triste su semblante.
Aquel hombre con fanfarria,
nada supo de razones,
solo dijo que en La Alcarria
se habla de Torrelodones.
Sin humildad en sus gestos
la gente no le escuchaba,
y quiso sacar sus restos
al ver que nadie le hablaba.
Sin comprender sus palabras
se fue alejando con prisa,
no valen las cosas raras
ni querer comprar la brisa.
G X Cantalapiedra.