SOBRAN CUENTOS EN LA SIERRA
Sobran cuentos en la sierra, si son frías las mañanas, dicen que la vida entierra a muchas personas sanas. En Hoyo de Manzanares apenas se oyen campanas, el eco de sus lugares nos dejan vidas profanas. Sobran cuentos por la sierra, mientras tiemblan las mañanas, nadie nos habla de guerra ni de las bellotas vanas. Vas caminando entre encinas por sus perdidas cañadas, y mirando a las colinas sientes brisas congeladas. Los vientos son temerosos en algunas madrugadas, y quieren correr marchosos sin explicar sus andadas. Hoy los cuentos andan sueltos lo mismo que algunas cabras, que pueden sufrir siniestros mientras por los campos pastan. Se nota que cuentan cuentos cuando la Luna esta clara, y no temen a los vientos, aunque este la noche rara. No quiero sentir más cuentos ni vivir la encrucijada, ni quiero perder alientos en la noche más quebrada. Me quieren contar un cuento, con La Luna marginada, y de nuevo sopla el viento sobre la noche encantada. Cuentos de los zagalillos que por la noche velaban, escuchando algunos grillos que en los rastrojos cantaban. El del burro rebuznando que a su pastor le llamaba, para contarle cantando lo bien de su vida andaba. Puedes contarme verdades que vengan desde la sierra, la niña gozaba edades que su juventud destierra. Cuentos de pastores viejos que caminaban cantando, para dejar los complejos que a veces fueron buscando. Los cuentos tienen sus pasos con muchas atrocidades, que pudieran ser fracasos de algunas autoridades. Cuentos que siguen volando en las noches misteriosas, donde los grillos chillando no se olvidan de las rosas.
G X Cantalapiedra.
Sobran cuentos en la sierra, si son frías las mañanas, dicen que la vida entierra a muchas personas sanas. En Hoyo de Manzanares apenas se oyen campanas, el eco de sus lugares nos dejan vidas profanas. Sobran cuentos por la sierra, mientras tiemblan las mañanas, nadie nos habla de guerra ni de las bellotas vanas. Vas caminando entre encinas por sus perdidas cañadas, y mirando a las colinas sientes brisas congeladas. Los vientos son temerosos en algunas madrugadas, y quieren correr marchosos sin explicar sus andadas. Hoy los cuentos andan sueltos lo mismo que algunas cabras, que pueden sufrir siniestros mientras por los campos pastan. Se nota que cuentan cuentos cuando la Luna esta clara, y no temen a los vientos, aunque este la noche rara. No quiero sentir más cuentos ni vivir la encrucijada, ni quiero perder alientos en la noche más quebrada. Me quieren contar un cuento, con La Luna marginada, y de nuevo sopla el viento sobre la noche encantada. Cuentos de los zagalillos que por la noche velaban, escuchando algunos grillos que en los rastrojos cantaban. El del burro rebuznando que a su pastor le llamaba, para contarle cantando lo bien de su vida andaba. Puedes contarme verdades que vengan desde la sierra, la niña gozaba edades que su juventud destierra. Cuentos de pastores viejos que caminaban cantando, para dejar los complejos que a veces fueron buscando. Los cuentos tienen sus pasos con muchas atrocidades, que pudieran ser fracasos de algunas autoridades. Cuentos que siguen volando en las noches misteriosas, donde los grillos chillando no se olvidan de las rosas.
G X Cantalapiedra.