El origen de Las Navas de Buitrago se remonta a la Edad Media. La historia en aquella época está estrechamente relacionada con la Reconquista y repoblación de la zona, acometidas a partir del siglo XI por Alfonso VI y sus sucesores. La economía se sustentaba en la cabaña ovina y en un sector agrario de subsistencia, con predominio de cultivos de secano, trigo y centeno, principalmente, y algunos huertos de regadío.
El paisaje agrario del término municipal se componía de prados pertenecientes, en su mayoría, a los comunes de la Villa y Tierra de Buitrago. Los propios del concejo se reducían a una dehesa boyal donde pastaban los ganados de labor y unas tierras labrantías que eran repartidas entre los vecinos para sembrar, ya que eran muy escasas.
La Iglesia es el único edificio de carácter singular de la época que persiste, aunque muy reformada en la actualidad. Se sabe que ya estaba levantada en el siglo XVII. Es conocida como la parroquia de la Cruz.
El paisaje agrario del término municipal se componía de prados pertenecientes, en su mayoría, a los comunes de la Villa y Tierra de Buitrago. Los propios del concejo se reducían a una dehesa boyal donde pastaban los ganados de labor y unas tierras labrantías que eran repartidas entre los vecinos para sembrar, ya que eran muy escasas.
La Iglesia es el único edificio de carácter singular de la época que persiste, aunque muy reformada en la actualidad. Se sabe que ya estaba levantada en el siglo XVII. Es conocida como la parroquia de la Cruz.