Población madrileña perteneciente al Partido Judicial de Arganda del Rey. Existen datos de ella desde el siglo XII, y su nombre es, según Madoz, de origen Vasco, debido a los efectos de la repoblación con pastores vascones durante la reconquista. Fue incorporada por el Arzobispo Bernardo Jimenez de Rada al Alfoz Complutense y a su vez a la jurisdicción eñorial del Arzobispado de Toledo. Fue una de las 25 villas que componían dicho Alfoz, por lo que su legislación dependía directamente del fuero de Alcalá. Recibió el título de Villa en 1555, por parte del Emperador Carlos y de España y V de Alemania. Felipe II la vendió, junto a otras villas pertenecientes al Arzobispado de Toledo, para sufragar los gastos del Estado con bula del Papa, y el comprador fue el Genovés Baltasar Catanno.