Esto que sigue, lo he colgado en el foro del pueblo donde nací, Almendral de Badajoz, pero como comparte rasgos con éste, pues ahí va:
Esto que ves moza recia, son huevos, pero de los de gallina.
Lo demás son brotes verdes y rojos. Quizá falte en cada uno de los huecos que han quedado vacíos y se ve la tierra, en uno, un puñado de trigo o de garbanzos y en el otro, otro puñado de arroz o unas cuantas papas.
Pero no son los brotes verdes esos que dicen los que se dedican a la política y a la economía, no, estos se comen y van muy bien para que el cuerpo se mantenga sanote.
Los otros, los que dicen esos señores y señoras tan sesudos ellos, también son buenos para la salud, pero para la salud social de este orbe en el que vivimos, donde muere de hambre o de sed tanta gente cada día. Aparte de las catástrofes naturales que, aún siendo previsibles, no se prevén porque estamos más ocupados intentando esquilmar los recursos naturales del sitio donde se va a producir que en tomar las medidas adecuadas para que el mal, si llega, sea el menor posible.
Hoy ha pasado en Haití, pero mañana puede pasar en Chile, el Estrecho de Gibraltar o en el Yemen; nombre este último que por lo que se ve quiere decir derecha. Y a la derecha de la derecha es donde quiero ir a parar. Vemos ya casi cada día por estos foros del mundo, con qué vitalidad están engorándose huevos, pero de serpientes. Y cómo, mucha gente que son buenas personas en principio, se dejan enredar por la dialéctica untuosa que, al socaire de la crisis económica o aprovechando los males que está acarreando a una sociedad que pensaba que el mundo era el país de jauja, y que instalada en la autocomplacencia no quiere ver esos brotes racistas y xenófobos y homofobos, que surgen por todas partes. Eso sí, repitiendo diariamente con machacona insistencia, que son angelicales seres que nos sacarán las castañas del fuego y que todo lo hacen desinteresadamente y por nuestro propio bien. Que los otros, los que intentan cultivar verduras y que coman todos, son mefistófeles dañinos o vampiros que nos están exprimiendo a todos la sangre para dársela a los “negratas”, “moracos” o “sudacas”.
Son un ramillete que se llama a sí mismos una élite elegida, pero hacen mucho ruido y están infestando todos los foros, haciendo que te llegue su mensaje repetitivo. También usando el correo y otros medios, como en Vic u otros municipios.
Es “la bicha,” pero no queremos verla por comodidad o porque pensar debe ser algo que da dolor de cabeza. O porque ya nos va bien así.
Salud.
Esto que ves moza recia, son huevos, pero de los de gallina.
Lo demás son brotes verdes y rojos. Quizá falte en cada uno de los huecos que han quedado vacíos y se ve la tierra, en uno, un puñado de trigo o de garbanzos y en el otro, otro puñado de arroz o unas cuantas papas.
Pero no son los brotes verdes esos que dicen los que se dedican a la política y a la economía, no, estos se comen y van muy bien para que el cuerpo se mantenga sanote.
Los otros, los que dicen esos señores y señoras tan sesudos ellos, también son buenos para la salud, pero para la salud social de este orbe en el que vivimos, donde muere de hambre o de sed tanta gente cada día. Aparte de las catástrofes naturales que, aún siendo previsibles, no se prevén porque estamos más ocupados intentando esquilmar los recursos naturales del sitio donde se va a producir que en tomar las medidas adecuadas para que el mal, si llega, sea el menor posible.
Hoy ha pasado en Haití, pero mañana puede pasar en Chile, el Estrecho de Gibraltar o en el Yemen; nombre este último que por lo que se ve quiere decir derecha. Y a la derecha de la derecha es donde quiero ir a parar. Vemos ya casi cada día por estos foros del mundo, con qué vitalidad están engorándose huevos, pero de serpientes. Y cómo, mucha gente que son buenas personas en principio, se dejan enredar por la dialéctica untuosa que, al socaire de la crisis económica o aprovechando los males que está acarreando a una sociedad que pensaba que el mundo era el país de jauja, y que instalada en la autocomplacencia no quiere ver esos brotes racistas y xenófobos y homofobos, que surgen por todas partes. Eso sí, repitiendo diariamente con machacona insistencia, que son angelicales seres que nos sacarán las castañas del fuego y que todo lo hacen desinteresadamente y por nuestro propio bien. Que los otros, los que intentan cultivar verduras y que coman todos, son mefistófeles dañinos o vampiros que nos están exprimiendo a todos la sangre para dársela a los “negratas”, “moracos” o “sudacas”.
Son un ramillete que se llama a sí mismos una élite elegida, pero hacen mucho ruido y están infestando todos los foros, haciendo que te llegue su mensaje repetitivo. También usando el correo y otros medios, como en Vic u otros municipios.
Es “la bicha,” pero no queremos verla por comodidad o porque pensar debe ser algo que da dolor de cabeza. O porque ya nos va bien así.
Salud.