Interrogantes aplicadas al sexo y las infidelidades: (¿?)
¿Debe darse el sexo sin amor? Casi todos tenemos claro que sí, aunque alguien piense que si se da con amor, mucho mejor, o al menos con un poco de cariño. ¿Puede darse el sexo fuera de la pareja? Es decir, ¿con alguien que no es tu pareja estable? Yo creo que aquí esta el conflicto por ser dos voluntades: una, la de seguir viviendo en un espacio seguro emocionalmente en el que además estás a gusto porque la persona con la que lo compartes te gusta, la quieres y tienes con ella proyectos comunes. La otra, es el deseo de tener sexo con otras personas, por que te lo piden los genes, las hormonas, los escotes, las minifaldas o los calendarios de bomberos.
Esa lucha entre esas dos fuerzas se da y yo me atrevería a decir que en todas las parejas. Más tarde o más temprano pero se dá.
¿Cuál es la forma más sana de conciliar estas dos voluntades?
¿Debemos renunciar a una vida feliz para poder tener sexo con otras personas? o ¿debemos renunciar a tener sexo con otras personas para salvar nuestra vida feliz? ¿Y si con esta renuncia nuestra vida no acaba siendo tan feliz como pensábamos?
¿Podemos seguir siendo felices con nuestra pareja practicando sexo con otras personas sin sentimiento de culpa y sin tener que dar explicaciones a nadie?
¿Por qué aun aceptando la infidelidad nos pone tan celosos/as pensar que nuestra pareja pueda estar con otra persona?
“Joder” con las preguntitas, puedes contestarlas tú.?
Con el deseo que seaís muy felices.
¿Debe darse el sexo sin amor? Casi todos tenemos claro que sí, aunque alguien piense que si se da con amor, mucho mejor, o al menos con un poco de cariño. ¿Puede darse el sexo fuera de la pareja? Es decir, ¿con alguien que no es tu pareja estable? Yo creo que aquí esta el conflicto por ser dos voluntades: una, la de seguir viviendo en un espacio seguro emocionalmente en el que además estás a gusto porque la persona con la que lo compartes te gusta, la quieres y tienes con ella proyectos comunes. La otra, es el deseo de tener sexo con otras personas, por que te lo piden los genes, las hormonas, los escotes, las minifaldas o los calendarios de bomberos.
Esa lucha entre esas dos fuerzas se da y yo me atrevería a decir que en todas las parejas. Más tarde o más temprano pero se dá.
¿Cuál es la forma más sana de conciliar estas dos voluntades?
¿Debemos renunciar a una vida feliz para poder tener sexo con otras personas? o ¿debemos renunciar a tener sexo con otras personas para salvar nuestra vida feliz? ¿Y si con esta renuncia nuestra vida no acaba siendo tan feliz como pensábamos?
¿Podemos seguir siendo felices con nuestra pareja practicando sexo con otras personas sin sentimiento de culpa y sin tener que dar explicaciones a nadie?
¿Por qué aun aceptando la infidelidad nos pone tan celosos/as pensar que nuestra pareja pueda estar con otra persona?
“Joder” con las preguntitas, puedes contestarlas tú.?
Con el deseo que seaís muy felices.