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DÍA 29 – 11 – 2022:
EL RIESGO DE SEPARAR A LOS HERMANOS:
Antonia, tuvo una vida bastante complicada, eran siete hermanos, y como muchísimas jóvenes salió de casa para poder abrirse camino, estuvo unos años trabajando en una casa, hasta que estalló la guerra civil Española, en la posguerra, se casó con Juan, del cual estaba muy enamorada, a pesar de que carecían de todo, fueron muy felices, tuvieron dos hijos, Francisco y Emilio, cuando los niños tenían cuatro y seis años, Juan cae enfermo, y los pocos ahorros que tenían, se los gastaron, al final Juan no supera la enfermedad, Antonia se queda sola con dos niños pequeños, y sin un trabajo, para poder sacar a sus hijos adelante, no sabe que hacer, una de sus hermanas, que esta casada y no tienen hijos la propone, quedarse con uno de ellos, después de mucho pensarlo, lo hace dejando ir al más pequeño, el niño esta encantado con los tíos, pues en el pueblo no le falta de nada, el mayor pasa muchas penurias junto a su madre, en las vacaciones, madre e hijo se van al pueblo, para estar junto a su hijo y hermano, Antonia se pasa todo el año ahorrando para poder comprarle algún regalo a Francisco, se da cuenta que esta sacrificando al mayor pues para el nunca hay nada, aunque el niño no se lo reprocha, cuando encuentra trabajo, intenta traerse a su hijo, pero el niño se niega, como es menor, la madre se impone y se lo trae, muy pronto se da cuenta de que ha perdido el cariño de ese hijo, y a pesar de que el tuvo una infancia muchísimo mejor que su hermano, siente unos celos terribles, la convivencia, de los tres fue muy desagradable, hasta que el niño creció y se dio cuenta de que su madre no le abandono, y que su hermano tuvo una infancia más difícil que la suya, a pesar de todo nunca se le fue ese resentimiento que sentía hacia su hermano, por haber vivido con su madre, Antonia pago un precio muy caro, pero la vida no se lo puso nada fácil, en esas circunstancias ¿Qué podía hacer?
ROSARIO FAJARDO BLANCO.
EL RIESGO DE SEPARAR A LOS HERMANOS:
Antonia, tuvo una vida bastante complicada, eran siete hermanos, y como muchísimas jóvenes salió de casa para poder abrirse camino, estuvo unos años trabajando en una casa, hasta que estalló la guerra civil Española, en la posguerra, se casó con Juan, del cual estaba muy enamorada, a pesar de que carecían de todo, fueron muy felices, tuvieron dos hijos, Francisco y Emilio, cuando los niños tenían cuatro y seis años, Juan cae enfermo, y los pocos ahorros que tenían, se los gastaron, al final Juan no supera la enfermedad, Antonia se queda sola con dos niños pequeños, y sin un trabajo, para poder sacar a sus hijos adelante, no sabe que hacer, una de sus hermanas, que esta casada y no tienen hijos la propone, quedarse con uno de ellos, después de mucho pensarlo, lo hace dejando ir al más pequeño, el niño esta encantado con los tíos, pues en el pueblo no le falta de nada, el mayor pasa muchas penurias junto a su madre, en las vacaciones, madre e hijo se van al pueblo, para estar junto a su hijo y hermano, Antonia se pasa todo el año ahorrando para poder comprarle algún regalo a Francisco, se da cuenta que esta sacrificando al mayor pues para el nunca hay nada, aunque el niño no se lo reprocha, cuando encuentra trabajo, intenta traerse a su hijo, pero el niño se niega, como es menor, la madre se impone y se lo trae, muy pronto se da cuenta de que ha perdido el cariño de ese hijo, y a pesar de que el tuvo una infancia muchísimo mejor que su hermano, siente unos celos terribles, la convivencia, de los tres fue muy desagradable, hasta que el niño creció y se dio cuenta de que su madre no le abandono, y que su hermano tuvo una infancia más difícil que la suya, a pesar de todo nunca se le fue ese resentimiento que sentía hacia su hermano, por haber vivido con su madre, Antonia pago un precio muy caro, pero la vida no se lo puso nada fácil, en esas circunstancias ¿Qué podía hacer?
ROSARIO FAJARDO BLANCO.