Como dijo el rey Juan Carlos, es un
blasón atípico, ya que no está formado con las reglas básicas de la Heráldica, sino que forma parte del encabezamiento del Título de Villa concedido a la ciudad.
Otro ejemplo de este tipo de blasón es el de Villanueva de
Córdoba (Córdoba), que por haber elegido también el encabezamiento del Título de Villa, ostenta como blasón nada menos que el
escudo de Carlos I de
España.