Desde 1480, en que los Reyes Católicos le enajenaron a la ciudad de
Segovia todo el Sexmo de Valdemoro y parte del Sexmo de Casarrubios, para hacer merced de todo ello a los marqueses de Moya, venía realizando todo tipo de acciones ante la Corona para recuperar todo lo que se le había sustraído.
El miércoles 10 de Octubre de 1499, el representante del concejo segoviano, Hernán Pérez, se trasladó hasta
Navalcarnero, reunió cinco vecinos de Perales, pues uno estaba ausente, y en un acto sencillo se procedió a la elección del primer
Ayuntamiento que tuvo Navalcarnero. Con este acto, la ciudad acababa de fundar un nuevo
pueblo: Navalcarnero. Los seis vecinos de Perales, que ni tan siquiera tenían
casa aquí, pasaban a ser vecinos de la nueva población.
Guerra de las Comunidades. A poco de fundado Navalcarnero, sobre 1521, se vive en Castilla una importante contienda en defensa de los fueros comunales, la Guerra de las Comunidades. A la llamada de Segovia acude Navalcarnero encabezado por Alonso de Arreo, regidor y procurador del Concejo del Municipio.
Privilegio de villazgo. Navalcarnero estuvo bajo la jurisdicción de Segovia desde 1499 hasta 1627, es decir, 128 años. Durante ese largo período los embates de los señoríos cercanos para acabar con la nueva población segoviana fueron continuos. Cuatro veces fue quemada y varias más intentaron arrasarla a mano armada. La ciudad de Segovia asumió la defensa de Navalcarnero desde el primer momento, respondiendo a cada uno de los ataques con contundencia.
En 1627, el vecindario se emancipó de Segovia comprando su propia jurisdicción a la Corona, haciéndose Villa independiente. El disgusto que esta emancipación proporcionó a Segovia fue grande y la misma luchó denodadamente para que no se produjera.
Bodas Reales. Privilegio de intitularse "Villa Real". El 7 de octubre de 1649, Navalcarnero fue testigo del acontecimiento más importante de toda su
historia: las relaciones del rey Felipe IV con su sobrina la archiduquesa Doña Mariana de
Austria.
El agradecimiento de Felipe IV a Navalcarnero por haber tenido lugar en el mismo su Real Casamiento... y para que haya memoria dello, fue la concesión del privilegio, fechado en
Madrid, el día 4 de Junio de 1651, por el que otorgaba a la villa la merced de que pudiera intitularse "La Villa de Villa Real de Navalcarnero". El título de "Villa" ya le había sido otorgado a Navalcarnero en el año 1627, al emanciparse de Segovia, ahora con motivo de la
Boda Real conseguía de Felipe IV poder añadir a éste el de "Villa Real". Es, por tanto, doblemente "Villa".
El otorgamiento del título de "Villa Real", concedido por Felipe IV a Navalcarnero, sucedía 26 años después de la emancipación. En estos momentos la población se hallaba en un compás de espera. En el siglo XVIII dará un salto cuantitativo, y a finales del siglo XIX suscitará la admiración en los escritores por el espíritu luchador de sus vecinos y el desarrollo alcanzado en la villa a causa de ello.
Este testimonio es un bello canto a la tenacidad de los moradores de este pueblo que se forjó en el
mar revuelto de la adversidad, el cual nació más tarde que la mayoría de las poblaciones de la comarca y alcanzó, sin embargo, cotas superiores de prosperidad y preeminencia sobre las poblaciones que le rodean, siendo designado, por ello, cabeza de Partido Judicial, cuyo ámbito engloba una veintena de
pueblos.
Guerra de Sucesión y Guerra de Independencia. En la Guerra de Sucesión, Navalcarnero tomó parte aprovisionando a las tropas de Felipe V de Borbón por orden del Consejo de Castilla.
También tuvo un papel destacado en la Guerra de Independencia, en la que el alcalde Antonio Celedonio Lorente envió noticias a Talavera, Trujillo,
Badajoz y
Sevilla el día 2 de mayo de 1808, del alzamiento contra los franceses en Madrid, con el fin de que concurrieran a la defensa de la patria, trasladando así el comunicado que le llegó, ese mismo día, de los alcaldes de
Móstoles. El resultado fue que toda
Extremadura se armó en breves días para combatir al invasor.
NAVALCARNERO: v. con ayunt. de la prov. y aud. terr. de Madrid (5 1/4leg.), part. jud. de su nombre, c. g. de Castilla la Nueva; y dióc. de
Toledo (9). SIT. en una pequeña colina, y sobre la
carretera que de Madrid dirige á Extremadura, la combaten todos los vientos, con más frecuencia el N., y su CLIMA es frío y sano: tiene 630
CASAS, la mayor parte de tierra y de mala construcción, distribuidas en varias
calles bastante regulares: hay una
plaza, la de la Constitución, una plazuela llamada la
Cruz Verde, casa de ayunt. en buen estado, cárcel, un
hospital titulado
San Pedro, cuyas escasas rentas se distribuyen hoy a los enfermos pobres en sus propias casas; de 6 a 8 posadas públicas;
escuela de primeras letras para niños, a la que concurren 100 que se hallan a cargo de un maestro dotado con 3,300 rs.; 2 de niñas cuyas maestras no tienen más dotación que lo que estipulan con los padres de sus discípulas; y una igl. parr. (La Asunción) con curato de térm. y provisión ordinaria hay ademas 2 vicarios perpetuos que se proveen por oposición; 2 tenientes aprobados por el diocesano, y 3 capellanes; el
edificio es bastante bueno y capaz, y en él se encuentra una suntuosa
capilla dedicada a Ntra. Sra. de la Concepción, que es la imagen más venerada, no tan solo por vec. de esta v., sino por los de los pueblos inmediatos; otra capilla, la Veracruz, hace de ayuda de parr.; y hay 4
ermitas tituladas San José, San Juan Bautista, San Roque y San Cosme; la de San Roque pertenece hoy a D. Juan Ribera, pintor de cámara de S. M., el que la ha reedificado y embellecido, colocando en ella cuadros notables pintados por él y por su hijo D. Carlos: y la de San Juan Bautista sirve de camposanto, el que no perjudica a la salud pública: los vec. se surten de
aguas para sus usos de las de 2
fuentes que se encuentran; la una a 1/4 leg. del pueblo, y la otra a 1/2; y para el de los
ganados, de diferentes
pozos. Confina el TÉRM. N.
Sevilla la Nueva y Villanueva; R. Móstoles,
Batres, y el r. Guadarrama; S. Casarrubios y
el Álamo, y O.
Villamanta: se extiende 1 leg. de N. á S., y 1 de E. á O., y comprende 2 desp. titulados Tarácentenos y Zarzuela; mucho viñedo, que puede considerarse su principal riqueza; 2
montes; el uno de encinas llamado Marimartin, que ocupa 3/4 leg. de N. á S. y 1/4 de E. á O., y el otro montecillo, cuya estension es de 1/4 leg. en todas direcciones; y por estar completamente despoblado se labra de tiempo en tiempo; una pequeña deh. boyal, varias
huertas y diferentes prados con buenos pactos; el r. Guadarrama pasa tocando el térm. por el lado E. y le atraviesan de E. á O. 3 arroyos titulados Villamanta, Doña Mariana y Juan de Toledo; los dos últimos son de escaso caudal, y desembocan en el r. Alberche después de unirse al primero: el TERRENO es arenisco y de mala calidad:
CAMINOS los que dirigen a los pueblos limítrofes; una cañada que va al Escorial, y la citada carretera de Extremadura, que pasa por el centro del pueblo: el
CORREO se recibe en su estafeta 3 veces a la semana: hay muchas tartanas que van y vienen diariamente a la corte, y pasa por esta v. la diligencia de Extremadura, y tiene una casa de postas: PROD. trigo, cebada, aceite, centeno, exquisitos garbanzos, vino,
frutas,
hortalizas y legumbres: mantiene
ganado lanar,
vacuno y mular, y cria
caza de liebres, perdices y otras aves: IND. la agrícola y un
molino de aceite: el
COMERCIO está reducido a la esportacion de vino y garbanzos, e importación de los art. de que se carece; se celebra una
feria el día 8 de setiembre, tan insignificante, que puede decirse no concurre a ella persona alguna: PORL. 728 vec. 3,158 alm.: CAP. PROD. 32.128,990 reales: IMP. 1.130,402: CONTR. 9'65 por 100.
El terr. que ocupa esta v. pertenecía en el año 1499 á tres vec. de Segovia, llamándose la Perdiguera y Navalcarnero. Estos vec. fundaron la v. en el año 1500. Los reyes despacharon provisión en 10 de setiembre para que nombrase sus alcaldes la c. de Segovia. Después compró su jurisd. Navalcarnero. En 6 de octubre de 1649 llegó a esta v. la archiduquesa Doña María Ana de Austria: en ella la esperaba el rey D. Felipe IV: al día siguiente los desposó y velo el arz. de Toledo D. Baltasar Moscoso en presencia del patriarca y de los principales de la corte, y se fueron luego al Escorial.
En 1834 el alcalde de Navalmoral, con algunos valientes, alcanzó a los carlistas mandados por Muñoz; les mató dos hizo prisionero a Muñoz con cuatro más, y los cinco restantes huyeron.
El
escudo de armas de esta v. ostenta el
acueducto de Segovia
* Diccionario Geográfico - Estadístico - Histórico de
España y sus posesiones de Ultramar, Pascual Madoz. Madrid, 1845.