Proyecto de ramal ferroviario Villamanta-Arenas de
San Pedro.
Comienza en 1927, cuando la dictadura de Primo de Rivera decide sacar un ramal desde la lína
Madrid-
Almorox, a la altura de Villamanta, hasta Arenas de San Pedro. Las obras de explanación no debieron empezar hasta finales de la década o principios de 1930 y se mantuvieron hasta el inicio de la guerra civil en julio de 1936. Se explanó la línea hasta el
valle del Tiétar, se logró avanzar en el desfiladero de Picadas, con la construcción de
puentes,
túneles y
viaductos, alcanzando San Martín, La Adrada y Casavieja.
El proyecto sólido de este ramal al Tiétar fue el iniciado en 1927. La línea de Almorox estaba aislada, y el oeste de la capital necesitaba entrada de mercancías por esa zona. Primero era el transporte del vino, pero el proyecto no solo era económico sino también paisajístico.
Poco más de seis años de trabajo permitieron avanzar mucho: Pelayos, entonces sin teléfono ni telégrafo, y San Martín contaron con sendas
estaciones terminadas. Todo parecía que tendría un final
feliz. A mediados de los años treinta, las autoridades ferroviarias, políticas y locales decidieron inaugurar la línea. No en vano, este tramo de seis kilómetros estaba tendido, con
vía métrica (un metro de ancho).
Se trajo una locomotora por
carretera, desde Almorox, y se preparó una
fiesta en San Martín. Se baraja que la fecha de dicha inauguración se situaría entre 1934 y 1936. El
tren no volvió a circular.