Berrutti tiene fama de "lobo solitario" y él lo asume con humor. "Necesito la soledad para trabajar, la
naturaleza para fundirme con ella. Quienes me conocen y me aprecian, respetan mi soledad y el silencio. El terreno que circunda mi
Casa Taller asume todas las variedades autóctonas de la
sierra de
La Cabrera, porque me gusta integrarme a fondo en el
paisaje. También con la
fauna. En
invierno se me puede colar algún zorro por el vallado, pero yo lo reconduzco a la salida para que siga su vida silvestre".