MALVA
Uso medicinal
Decocción para aliviar el estreñimiento:
Hervir 1/2 l. De agua y añadir dos puñados de hojas y flores de malva secas. Dejar cocer durante cinco minutos y reposar durante diez minutos en un recipiente tapado. Colar y endulzar con azúcar o miel.
Tomar regularmente dos tazas al día.
Leche de malvas para aliviar la tos:
Hervir 1/4 l. De leche y añadir un puñado de hojas de malva frescas o bien dos puñados de hojas secas y molidas. Dejar cinco minutos al fuego y luego colar.
Tomar un vaso bien caliente antes de acostarse todas las noches mientras dure la tos.
Infusión para uso externo:
Hervir 1 l. De agua y añadir cuatro cucharadas de flores de malva secas. Dejar cocer un minuto y reposar cinco minutos. A continuación, colar y guardar en un frasco cerrado.
Aplicar sobre la piel, empapando la infusión caliente en gasas y colocando éstas durante cinco minutos sobre la zona irritada o seca. Los enjuagues bucales deben realizarse al menos tres veces al día, y las irritaciones vaginales, con la infusión templada, una vez al día, por la noche.
Uso cosmético
Crema de noche para suavizar la piel y prevenir las arrugas:
Calentar al baño maría 60 g de mantequilla hasta que se ponga líquida. Añadir luego tres puñados de flores frescas de malva y revolver durante diez minutos sin dejar que hierva. Verter en el bote con cierre en el que se vaya a guardar la crema.
Aplicar la crema con un suave masaje por la cara antes de acostarse todas las noches.
Uso medicinal
Decocción para aliviar el estreñimiento:
Hervir 1/2 l. De agua y añadir dos puñados de hojas y flores de malva secas. Dejar cocer durante cinco minutos y reposar durante diez minutos en un recipiente tapado. Colar y endulzar con azúcar o miel.
Tomar regularmente dos tazas al día.
Leche de malvas para aliviar la tos:
Hervir 1/4 l. De leche y añadir un puñado de hojas de malva frescas o bien dos puñados de hojas secas y molidas. Dejar cinco minutos al fuego y luego colar.
Tomar un vaso bien caliente antes de acostarse todas las noches mientras dure la tos.
Infusión para uso externo:
Hervir 1 l. De agua y añadir cuatro cucharadas de flores de malva secas. Dejar cocer un minuto y reposar cinco minutos. A continuación, colar y guardar en un frasco cerrado.
Aplicar sobre la piel, empapando la infusión caliente en gasas y colocando éstas durante cinco minutos sobre la zona irritada o seca. Los enjuagues bucales deben realizarse al menos tres veces al día, y las irritaciones vaginales, con la infusión templada, una vez al día, por la noche.
Uso cosmético
Crema de noche para suavizar la piel y prevenir las arrugas:
Calentar al baño maría 60 g de mantequilla hasta que se ponga líquida. Añadir luego tres puñados de flores frescas de malva y revolver durante diez minutos sin dejar que hierva. Verter en el bote con cierre en el que se vaya a guardar la crema.
Aplicar la crema con un suave masaje por la cara antes de acostarse todas las noches.