En la actualidad La Puebla ofrece cómodos alojamientos (ubicados en antiguas construcciones rurales, recientemente acondicionadas), enmarcados por un entorno natural incomparable por sus bien conservados parajes, así como por sus gentes acogedoras y tranquilas. También podemos contar con sus instalaciones deportivas y una piscina natural en el río, arropada por robles centenarios.