Juana 1ª de Castilla.
Paseo de Argentina o paseo de las Estatuas.
Parque de El Retiro.

Este monumento a Juana 1ª de Castilla fue inaugurado hace apenas unos meses (abril de 2022). La obra es de Iria Groba Martín.
Está sobre un pedestal que estuvo vacío en el paseo de Argentina muchísimos años sin que nadie supiera por qué.
Esta Reina, que "El Poder" intentó que pasara a la historia como “Juana la Loca”, nació en Toledo, hoy hace 543 años (nace el 6 de noviembre de 1479, y fallece en Tordesillas el 12 de abril de 1555 después de pasar 46 años prisionera en esta localidad)
Fue apodada “la Loca” por una triple confabulación tramada por su padre, su esposo, y después confirmada por su hijo, por una supuesta enfermedad mental para apartarla del trono de por vida. Cuentan que no tenía “devoción” por los ritos religiosos de la época y que estaba “locamente” enamorada de su marido, y que éste, por el contrario, poco respeto le tenía, ni como mujer ni como Reina. Entre los celos y el dolor que sintió tras la prematura muerte de su esposo y aquel escepticismo religioso, parece que no era la figura ideal para poder obtener tan alto privilegio.
Juana, quizá debiera ser recordada como Juana la Prisionera o Juana I de Trastámara o de Castilla o mejor aun: Juana I de España, pues al morir su padre se convirtió en la primera Reina de las coronas de Castilla, Aragón y Navarra, que fueron las que conformaron la actual España. Además, ella nunca fue declarada incapaz por las Cortes de Castilla ni se le retiró el título de Reina. Nominalmente, seguía siendo “La Reina”, pero quien tenía el poder real era su hijo Carlos.
Con el levantamiento de Los Comuneros de 1520 la sacaron de la cárcel y le pidieron encabezar la revuelta contra el rey extranjero, pero ella se negó al no querer enfrentarse a su hijo. Cuando su hijo Carlos derrotó a los Comuneros de Castilla volvió a mantenerla encerrada.
A Juana, que pudo haber sido una de las mujeres más importantes de la humanidad, no se le permitió asumir el papel para el cual estaba destinada.
Y bueno, si paseáis por este precioso paseo de Argentina en El Retiro, veréis su estatua acompañada de dos mujeres más: Doña Urraca y Doña Berenguela. El resto de las estatuas de este paseo están dedicadas a Reyes.
Hay un poema de Federico García Lorca; “Elegía a Doña Juana la Loca”, que comienza así:
Princesa enamorada sin ser correspondida.
Clavel rojo en un valle profundo y desolado.
La tumba que te guarda rezuma tu tristeza
a través de los ojos que ha abierto sobre el mármol.
Eras una paloma con alma gigantesca
cuyo nido fue sangre del suelo castellano,
derramaste tu fuego sobre un cáliz de nieve
y al querer alentarlo tus alas se troncharon.
Soñabas que tu amor fuera como el infante
que te sigue sumiso recogiendo tu manto.
Y en vez de flores, versos y collares de perlas,
te dio la Muerte rosas marchitas en un ramo...