ROBLEDILLO DE LA JARA: Robledillo de la Jara Robledillo de la Jara se sitúa...

Robledillo de la Jara
Robledillo de la Jara se sitúa en el sector septentrional de la provincia de Madrid, en las estribaciones de los Cerros de la Mujer Muerta. Su territorio está atravesado en dirección norte-sur por una barrera montañosa que oscila entre los 1300 y los 1000 m. De altitud. Esta barrera divide el término en dos vertientes: una oriental que vierte sus aguas en la cuenca del Riato, afluente del Lozoya, y otra occidental, en declive sobre el propio río Lozoya que se encuentra embalsado en esta zona por las presas de El Villar y El Atazar. A ellas desembocan los arroyos Aborrero y de la Dehesa, situándose entre ambos el lugar de Robledillo, a una altitud de 1042 m., en un terreno despejado con fuertes pendientes hacia el oeste y magníficas vistas.
En su entorno inmediato se cultivan algunos pequeños huertos con escasa incidencia en el paisaje circundante, formado por monte bajo, jara y retamas sobre todo, con algunos pinares jóvenes en la zona de repoblación mientras que en los valles encajonados por donde bajan los ríos, aparecen los robledales autóctonos mezclados con madroños, encinas o alcornoques aislados.
En las laderas sobre el Lozoya, con orientación suroeste que garantiza el asoleo y protegidas del viento, existían plantaciones de las que hoy sólo quedan las cercas de piedra que las limitaban y protegían frente a los animales.
El ganado lanar era la base de la economía comarcal, y los rebaños bajaban en gran número por la Cañada Real de La Hiruela que atraviesa el término por el noroeste, tras cruzar el Lozoya por el puente medieval de El Villar, hoy despoblado.
El pueblo se llamó inicialmente sólo Robledillo, en referencia a los abundantes bosques de robles que en tiempos poblaban el territorio. El apelativo "de la Jara" se tomó únicamente cuando se hizo necesario para diferenciarse de otros Robledillos y procede del llamado "Quarto de la Xara" al que pertenecía Robledillo dentro de la división administrativa de la Tierra de Buitrago. Ese nombre deriva de la masiva presencia de esta planta en la comarca.