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GRANDES PIEZAS

Luis Berrutti expone sus esculturas en plena montaña





Julia Sáez-Angulo






Tiene su casa y su taller en la montaña madrileña, de la que confiesa recibir la inspiración, transmitiendo su fuerza telúrica a grandes instalaciones de piedra, hierro o cerámica.

17 de noviembre de 2004. La Casa Taller de Arte Berrutti está instalada en la sierra de La Cabrera (Madrid). Se trata de una espléndida instalación artística y cultural, donde el escultor Luis Berrutti trabaja sus grandes piezas en piedra, hierro, cerámica o técnica mixta, así como la pintura y el grabado. El autor es un lobo solitario de las cumbres, a quien gusta trabajar en soledad: le inspiran la fuerza y la energía de la montaña y, en ella, a 50 kilómetros de Madrid, no lejos de Valdemanco, ha situado su Casa Taller, una especie de museo abierto al aire libre, donde pueden entrar los paseantes solitarios de la sierra o los visitantes que deseen conocer su trabajo.

La naturaleza como referente es el título de una exposición antológica de sus obras más significativas a lo largo de su carrera, recogidas en un catálogo patrocinado por TECRESA y que se muestran en su Casa Taller (Comarcal 610, km 4, 100). Berrutti, que prepara las cosas para "una próxima fundación que evite la dispersión de sus obras", declara para Elsemanaldigital.com que "su Casa Taller ha de ser un lugar de encuentro para disfrutar el arte en medio de un paraje en el que se crearon sus esculturas y en el que se muestran buena parte de ellas al aire libre. Algunas cogen una pátina especial a la intemperie".

Berrutti tiene fama de "lobo solitario" y él lo asume con humor. "Necesito la soledad para trabajar, la naturaleza para fundirme con ella. Quienes me conocen y me aprecian, respetan mi soledad y el silencio. El terreno que circunda mi Casa Taller asume todas las variedades autóctonas de la sierra de La Cabrera, porque me gusta integrarme a fondo en el paisaje. También con la fauna. En invierno se me puede colar algún zorro por el vallado, pero yo lo reconduzco a la salida para que siga su vida silvestre".

Los vecinos de Valdemanco y La Cabrera conocen bien a este artista que hace unas esculturas monumentales que impresionan, al que visitan de vez en cuando otros colegas y coleccionistas que llevan sus obras para museos y jardines al aire libre. No es difícil verlo trabajar con buzo y máscara para evitar las chispas de la soldadura autógena cuando trabaja en sus obras, dentro de su recinto vallado.