En esta
iglesia destaca su magnífica
fachada, que compone admirablemente con su esbelta
torre. Domina en la fachada un gran lienzo de aparejo concertado de estilo toledano, en cuyo centro luce una bella
portada toscana con pirámides y bolas y relieve con la liberación de
San Pedro en
hornacina central. El lienzo fundamental de la fachada se corona después de una cornisa por un ático o
frontón mixtilíneo de elegante silueta recortada, cuyo centro lo preside un relieve con el
escudo de San Pedro. La torre parte de un cuerpo cuadrangular, con un piso de
campanas, que lleva
arcos de medio punto por dos de sus lados, encajados en una serie de resaltos apilastrados típicos del siglo XVII, sobre el que corona un ochavo de época posterior que a su vez termina en un chapitel o pirámide de pizarra.