el tren de los heridos, de miguel hernandez.
-silencio que naufraga en el silencio de las bocas cerradas de la noche. no cesa de callar ni atravesado. habla el lenguaje ahogado de los muertos.-silencio-
-abre caminos de algodón profundo, amordaza las ruedas, los relojes, detén la voz del mar, de la paloma: emociona la noche de los sueños.-silencio-
-el tren lluvioso de la sangre suelta, el frágil tren de los que se desangran, el tren callado de los sufrimientos.-silencio-
-tren de la palidez mortal que asciende: la palidez reviste las cabezas, el ¡ay! la voz, el corazón la tierra, el corazón de los que malhirieron.-silencio-
-van derramando piernas, brazos, ojos, van arrojando por el tren pedazos. pasan dejando rastros de amargura, otra vía láctea de estelares miembros.-silencio-
-ronco tren desmayado, enrojecido: agoniza el carbón, suspira el humo y, maternal la maquina suspira, avanza como un largo desaliento.-silencio-
-detenerse quisiera bajo un túnel la larga madre, sollozar tendida. no hay estaciones donde detenerse, si no es el hospital, si no es el pecho.
para vivir, con un pedazo basta: en un rincón de carne cabe un hombre. un dedo solo, un solo trozo de ala alza el vuelo total de todo un cuerpo. detened ese tren agonizante que nunca acaba de cruzar la noche. y se queda descalzo hasta el, caballo, y enarena los cascos y el aliento.
1910 marzo de 1942
-silencio que naufraga en el silencio de las bocas cerradas de la noche. no cesa de callar ni atravesado. habla el lenguaje ahogado de los muertos.-silencio-
-abre caminos de algodón profundo, amordaza las ruedas, los relojes, detén la voz del mar, de la paloma: emociona la noche de los sueños.-silencio-
-el tren lluvioso de la sangre suelta, el frágil tren de los que se desangran, el tren callado de los sufrimientos.-silencio-
-tren de la palidez mortal que asciende: la palidez reviste las cabezas, el ¡ay! la voz, el corazón la tierra, el corazón de los que malhirieron.-silencio-
-van derramando piernas, brazos, ojos, van arrojando por el tren pedazos. pasan dejando rastros de amargura, otra vía láctea de estelares miembros.-silencio-
-ronco tren desmayado, enrojecido: agoniza el carbón, suspira el humo y, maternal la maquina suspira, avanza como un largo desaliento.-silencio-
-detenerse quisiera bajo un túnel la larga madre, sollozar tendida. no hay estaciones donde detenerse, si no es el hospital, si no es el pecho.
para vivir, con un pedazo basta: en un rincón de carne cabe un hombre. un dedo solo, un solo trozo de ala alza el vuelo total de todo un cuerpo. detened ese tren agonizante que nunca acaba de cruzar la noche. y se queda descalzo hasta el, caballo, y enarena los cascos y el aliento.
1910 marzo de 1942