Alcantarilla se ha convertido en una ciudad dormitorio de
Murcia por la escasa distancia que las separa -apenas siete kilómetros- y la sucesión ininterrumpida de viviendas que jalonan los accesos comunes. No obstante, Canthara-Eskebah, primer topónimo de esta alquería musulmana que el geógrafo Al-Idrisi citó en el siglo XII como paso obligado para trasladarse de Murcia a
Almería, tiene su propia
historia e identidad. No fueron los árabes sus primitivos pobladores, sino los
romanos, que aprovechando el caudal del
río cultivaron algunas de estas tierras y construyeron en el siglo IV antes de
Cristo un
acueducto. "Para caminar de Murcia se ha de dirigir el viajero al
Puente Ascayato" indicaba el Nubiense, a lo que Juan Lozano agregó: "Juzgaba yo hallar sobre Sangonera los vestigios del puente, pero todo fue en vano. Mas aquí, a una legua, pasada la Alcantarilla, se halla un célebre puente, el del Pontarrón. Sus
ruinas son del todo
romanas". Al parecer, Alcantarilla tomó su nombre de este pequeño puente, si nos ajustamos a la traducción de Canthara-Eskebah: "el puente más próximo", aunque a partir de la reconquista castellana el nombre de la villa se modificase por el de Alcantariella o puente pequeño. Este puenticico o puente de las
Pilas, como la voz popular lo identifica, forma parte de la leyenda
medieval referida al hecho milagroso que dió lugar al patronazgo de la
Virgen de la Salud.
Legado histórico
El asentamiento medieval se produjo en el
camino de
La Ñora. En 1266 Alcantarilla era propiedad del rey moro Aben Hud, pasando pocos años después al patrimonio de la Reina Violante, esposa de Alfonso X. En el año 1283 el rey Sabio la cedió al concejo de Murcia para recompensar la lealtad mantenida durante su reinado, aunque la muerte inmediata de Alfonso X y la sucesión de Sancho IV impidieron la donación. Esta circunstancia fue determinante para la identidad e independencia de la villa, que mantuvo su población musulmana hasta la Edad Moderna. Junto a la villa de Alguazas fue canjeada por el
castillo almeriense de Lebrín, sufriendo continuos avatares con Murcia por su cercanía. Una de las devastadoras riadas del Segura obligó al vecindario a cambiar de ubicación e instalarse en una zona más elevada, lo que hoy es el
barrio de
San Pedro. La expulsón de moriscos afectó a su producción agrícola, pero a diferencia de los
pueblos del
Valle de Ricote, recuperó su pujanza a los pocos años. El
ejército francés saqueó Alcantarilla durante la guerra de la Independencia, y en el siglo XIX, con la abolición de los señoríos, la villa consigue la antigua reivindicación de constituirse en municipio.
ALCANTARILLA: v. con ayunt. en la prov. part. jud. y adm. de rent. de Murcia (1 leg.), aud. terr. de
Albacete (22), c. g. de
Valencia (31), dióc. de Cartagena (9): SIT. en el confín O. de la
huerta de la cap., sobre una pequeña pendiente y a 1/4 de leg. del r. Segura: sus cercanías por la parte de Murcia son amenas, con hermosas
huertas, si bien hacia Lebrilla el terreno es seco y no ofrece variedad alguna: tiene 700
CASAS, pósito,
posada bastante buena, un
hospital, igl. parr. (S. Pedro) servida por un cura propio; dos
escuelas públicas: una de niños de enseñanza elemental completa, dotada con 1,300 rs. de los fondos municipales, a la que concurren 49 alumnos, y la otra de niñas con 200 rs. y 36 discípulas. Hay además una
escuela particular de niños (175), y el
edificio casi arrumado del conv. que fue de mínimos. Confina el TÉRM. por N. y SO. con el de Voz-negra, y por E. y SE. con el de Murcia; se extiende por el N. 1,050 pasos. E. 350, S. 710 y O. 160, y comprende 2,868 tahúllas y 6 celemines de tierra, de las cuales 1,547 disfrutan del riego con las
aguas del Segura y las restantes son de secano: las labores se hacen con 70 pares de
ganado mular y unos 20 de caballar. Pasa por la v. la
carretera para
Andalucía y hay varios
CAMINOS trasversales para los pueblos de la huerta. La CORRESPONDENCIA se recibe en los días en que llegan a Murcia los
correos generales: el de
Madrid llega a esta c. los martes, viernes y domingos a las 6 de la mañana.: PROD.: trigo, cebada, maíz, barrilla, seda, lino, poco aceite, y bastante
hortaliza y
frutas: hay cría de ganado lanar fino y ordinario, cabrío,
vacuno y cerdoso: POBL. 823 vec.: 3,481 hab. dedicados a la
agricultura: hay algunas fab. de jabón duro. RIQUEZA PROD. TERR. 11.112,500 rs. IMP. 333,375 rs.: PROD. DE LA IND. Y
COMERCIO 49,500 rs. CONTR. 92,028 rs. En los miércoles de cada semana celebra un
mercado muy concurrido por los vec. de las pobl. comarcanas. Siendo esta v. una pobre alq. de moros, la conquistó el infante D. Alonso (después rey X de su nombre) en 1244, y la dio a D. Pedro Yáñez, VI maestre de la Orden de Alcántara, en recompensa de sus servicios quien le denominó Alcantarilla. Más adelante el mismo rey D. Alonso la tomó para sí; y en 1283 hizo donación de ella a la c. de Murcia, mandándola poblar de nuevo, y recompensó a la Orden de Calatrava con los cast. de Elbes y Cambullón, y la
torre de Alpechín. Después, habiéndose roto una de las acequias que riegan sus
campos se inundó y quedó arruinada: sus moradores se trasladaron al sitio que hoy tiene, que es como a 2 tiros de fusil del que antes ocupaba. En 1811 el general Freiré sentó sus cuarteles en ella: sus fuerzas en aquel momento estaban reducidas a la caballería del brigadier Osorio, y a tres divisiones propias del tercer ejército, habiendo marchado las expedicionarias camino de Valencia. Al siguiente año, 1812, fue saqueada por los franceses. Alcantarilla hace por armas un
escudo sembrado de berros colorados y blancos en
campo de gules.
* Diccionario geográfico - estadístico - histórico de
España y sus posesiones de Ultramar, Pascual Madoz. Madrid, 1845.