De su interior destaca la
capilla de la Cofradía Marraja, construida en 1690 y recientemente restaurada, que alberga un
retablo barroco de madera policromada con numerosas imágenes de la
Semana Santa, entre ellas algunas de Capuz. La
Iglesia de
Santo Domingo pertenecía al antiguo
convento de
San Isidoro, de la Orden de Santo Domingo, sobre el que se construyó esta iglesia castrense de la Armada en 1875. Tras su reconstrucción en 1880 se abrió de nuevo al culto y una posterior reforma en 1973 dio lugar a una remodelación total de la iglesia.