Se trata del
parque formado en torno a los restos del
Castillo de la Concepción, que recibió el nombre del alcalde, Alfonso
Torres; incluía un pequeño estanque con patos, cosa que llamó mucho la atención a los cartageneros, que dieron en llamar al lugar Castillo de los Patos. A partir de 1965 y hasta 1983, se producen nuevas intervenciones que tratan de restaurar el parque, el cual había quedado bastante abandonado, y completarlo con nuevas construcciones. En estos años se construyen el auditorio, la
cafetería y se comienza a restaurar la
torre del
homenaje.