Pero el protagonismo hoy se lo daremos al propio cerro y su transformación a partir de 1924 como
parque público y al primer proyecto paisajístico nacido de los diseños de Víctor Beltrí, que supuso una de las realizaciones urbanísticas más importantes en
Cartagena durante la dictadura de Primo de Rivera y de su hombre de confianza: el alcalde Alfonso
Torres, de quien tomaría su nombre el parque. El proyecto de Víctor Beltrí se fundamentó en el ajardinamiento de un cerro árido y sin apenas tierra vegetal, en donde todavía estaban los restos del
castillo medieval, al que no se le tuvo el menor respeto como resto arqueológico; se trataba de convertir el conjunto del nuevo parque en un lugar de esparcimiento y
mirador de la ciudad.