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Durante las dos legislaturas del PP, entre 1997 y 2003, se le otorgan 600 días por redenciones extraordinarias, casi dos años.
-1997: 31 días, por razones que no constan en el expediente. -1998: 13 días, por razones que tampoco constan en el expediente.
-1999: redención de 175 días, la máxima permitida, por la autoría de una novela, Días-Egunak, un libro que ensalza la estrategia de ETA.
-2000: se le vuelven a computar otros 175 días por rendimiento intelectual (la escritura de la misma novela); es decir, por el mismo concepto.
-2001: 117 días por capacidad redactora y un curso sobre el arte de escribir.
-2002: redención de 89 días por redacción y curso de escribir y por deporte programado.
En total: el Gobierno del PP otorgó a De Juana 600 días de redenciones extraordinarias, dos de ellas de 175 días cada una por escribir el mismo libro.
Estos son hechos constatados y no la falacia y la mentira que estos peperos intentan hacer, que no es otra cosa que lo único que saben, mentir, mentir o no decir la verdad. Cuando ellos gobernaban hacían de todo y no pasaba nada, ahora como no son ellos los que gobiernan intentan golpear los cimientos de la democracia y la libertad con mentiras y manifas, ladrando su rencor por las esquinas.
-1997: 31 días, por razones que no constan en el expediente. -1998: 13 días, por razones que tampoco constan en el expediente.
-1999: redención de 175 días, la máxima permitida, por la autoría de una novela, Días-Egunak, un libro que ensalza la estrategia de ETA.
-2000: se le vuelven a computar otros 175 días por rendimiento intelectual (la escritura de la misma novela); es decir, por el mismo concepto.
-2001: 117 días por capacidad redactora y un curso sobre el arte de escribir.
-2002: redención de 89 días por redacción y curso de escribir y por deporte programado.
En total: el Gobierno del PP otorgó a De Juana 600 días de redenciones extraordinarias, dos de ellas de 175 días cada una por escribir el mismo libro.
Estos son hechos constatados y no la falacia y la mentira que estos peperos intentan hacer, que no es otra cosa que lo único que saben, mentir, mentir o no decir la verdad. Cuando ellos gobernaban hacían de todo y no pasaba nada, ahora como no son ellos los que gobiernan intentan golpear los cimientos de la democracia y la libertad con mentiras y manifas, ladrando su rencor por las esquinas.