La comarca de
Jumilla ha sido objeto de diversos asentamientos de población y culturas a lo largo de la
historia, lo que la hacen rica en
tradiciones, yacimientos y
monumentos de gran valor arquitectónico.
Para introducirnos en la historia de una encrucijada de
caminos y culturas es preciso remontarnos a la protohistoria, como el mundo ibérico en pleno florecimiento.
La llegada de los
romanos dio origen a las "villas", que tan abundantes son en la Comarca y que tan ricos restos materiales nos han legado, como los magníficos
mosaicos pertenecientes a la Villa de los
Cipreses, del siglo IV d. C., que se pueden contemplar en el
Museo Arqueológico del
Palacio del Concejo.
La irrupción árabe dejó abundantes huellas, entre las que destaca El
Castillo.
Por el tratado de Turmir, Jumilla quedó islamizada desde el año 713 hasta 1241, en que pasa a formar parte de la Corona de Castilla. Con la muerte de Alfonso X, es incorporada a la corona de
Aragón, hasta que el rey Pedro I la conquistó definitivamente para Castilla en 1357.
En 1445, Jumilla pasó a formar parte del señorío de Villena y recobró todo su esplendor, hasta que las tropas francesas saquearon la ciudad y tomaron el castillo en 1813, cuya ocupación duró un año.
El 17 de julio de 1911, el rey Alfonso XIII concedió a Jumilla el título de Ciudad, y a su
Ayuntamiento el tratamiento de Excelentísimo.
JUMILLA: v. con ayunt. en la prov. de
Murcia (10 leg), en donde reside la silla episcopal de Cartagena, a cuya dióc. pertenece, part. jud. de
Yecla (4) aud. terr. de
Albacete (10) y c. g. de
Valencia (22). SIT. al pie de una colina que llaman
Sierra del Castillo, en cuya cúspide hay vestigios de uno que estuvo artillado no ha muchos años, gozado un CLIMA saludable y benigno, está bien ventilado y resguardada del viento N., y no se conocen enfermedades endémicas. Se compone de unas 1,500
CASAS de regular construcción de 6 varas de altura, formando todas cuerpo de pobl., distribuidas en varias
calles no muy anchas, pero limpias y empedradas, y 3
plazas denominadas de Arriba, de Abajo y del
Convento; en la
calle llamada de la Tercia, se ve la
casa donde nació D. Juan Lozano y Lozano, arz., virrey y capitán general que fué en Nápoles a mediados del siglo XVII, cuya obra del siglo XV con sus famosos artesonados,
columnas y palios, es de un mérito singular, por lo que es visitada con curiosidad por los extranjeros: hay un
edificio que en otro tiempo serbia de
hospital, en cuya igl. celebra en la actualidad el ayunt. sus sesiones y demás actos, por hallarse ruinosas las casas consistoriales; un pósito que al presente cuenta un capital muy insignificante; dos
escuelas de primeras letras, a las que concurren unos 130 niños, cuyos padres no siendo pobres, dan una retribución mensual a los maestros; dos enseñanzas de niñas a las que asisten en número de 60, y una cátedra de latinidad con 15 discípulos; tiene dos igl. parr., la de Santiago, curato de cuarta clase con 2 anejos, uno en la ald. de Outur (
San José) y otro en la de
Albatana (San Ildefonso) servida por un cura ecónomo, un teniente para la parr. y 2 para los anejos; 13 eclesiásticos seculares y 8 exclaustrados; la otra es del Salvador, de segunda clase con su párroco correspondiente, un clérigo secular y 6 exclaustrados: los templos de una y otra parr. son los
edificios más notables de esta pobl.; el de Santiago consta de 3 naves, siendo su
arquitectura del orden corintio y jónico, con artesonados de mucho mérito, enriquecido con bellas pinturas de Rubens y Ribalta y varios tallados de Sarcillo; tiene una tabla de Juanes, en la que aparece el pasaje de Emaús; dos frescos de mucho mérito de Bayen representando el uno Sta. Cecilia, y el otro al
Santo rey David, El
coro es de los más acabados en su clase; se compone de 40 sillas de
nogal muy bien trabajadas, con otras tantas columnas de madera de naranjo; a consecuencia del decreto del Sr. Mendizábal en 1836 se recogieron en esta igl. 12 a. de plata en diferentes alhajas y vasos sagrados. La parr. del Salvador es del orden toscano y jónico, con ricas pinturas de los mejores autores españoles de las escuelas valenciana y sevillana; varios de sus cuadros han llamado tanto la atención de algunos viajeros ingleses, que han solicitado adquirirlos, aunque en vano, a cualquier precio. Dentro de esta v. hay 4
ermitas, la ant. párr. de Sta. Maria, obra del siglo X, donde predicó San Vicente Ferrer en lengua lemosina, cuyo sermón escrito de su puño se conserva en los archivos de la misma; las de San Roque, San Antón y Ntra. Sra. de la Asunción, nada contienen de notable, excepto la última que es de buena fáb. con un famoso camarín; hubo antes de la extinción de los Regulares, un conv. de la orden de San Francisco, cuyo edificio se halla casi destruido; contiene ademas 4 posadas medianamente asistidas; una
fuente llamada de la Villa, cuyas
aguas sirven para beber, lavar y otros usos, muchos
pozos y un
pilón para
abrevadero de bestias; existe por último un
cementerio para ambas parr. extramuros, bien ventilado y en nada perjudica a la salud pública. El TÉRM. confina al N. con el de Yecla (2 leg); E. Abaran, Fortuna y Abanilla; S.
Cieza, y O.
Fuente Álamo, Montealegre,
Ontur, Hellin y Albatana todos de la prov. de Albacete: en él se encuentran las ald. llamadas
la Alquería, al N. de la v. con unas 40 casas reunidas, y
Fuente del Pino, la otra con 25 de aquellas; varias ermitas dedicadas a diferentes
santos, y como a una hora de Jumilla el tan nombrado conv. de Sta. Ana del
Monte, de frailes Franciscos sit, en una
montaña poblada de
pinos, carrascas, madroñeras, romeros y plantas medicinales; en este
monasterio vivieron por muchos años San Pascual Bailón y el beato Andrés Yubernou, a quien se le da culto público en una
capilla de la
catedral de Murcia. El TERRENO generalmente es flojo, pedregoso, árido, poco productivo y de secano; llano en unas partes, montuoso en otras, distinguiéndose la sierra Larga, la de Carche, que va formando cordillera hasta enlazarse con la de Salinas, la de Escarihuela, Sta. Ana, barranco de la Escala, Morrón, la del Buey, Peña Rubia y otras, las cuales estuvieron pobladas de grandes
pinares, conservando en el día pocos, pero sí muchos arbustos y mata baja. Los CAMINOS a más de los que comunican con los
pueblos cincunvecinos, los tiene provinciales y otros que dirigen a la Mancha y Valencia, todos en regular estado. La CORRESPONDENCIA se recibe de la estafeta ó adm. subalterna de Yecla, 3 veces en la semana, PROD.: vino como unas 15,000 arrobas anuales de excelente calidad y de un aroma muy superior, especialmente el que se coge en el part. de la
Cueva Negra y casa del Rico; aceite, trigo, cebada y centeno, de cuyas especies, unos años sobran y se exportan para el reino de Valencia, y otros son insuficientes para el consumo de la pobl.; cultivase el cáñamo y el azafrán, y se crian
hortalizas muy sabrosas; hay
ganado lanar de cria en número de 8,000 cabezas y otras tantas del cabrío; y
caza de liebres, perdices y conejos, IND.: la principal es la agrícola, mas existen porción de telares comunes en los cuales se elaboran lienzos bastos para el consumo dé los vec., paños burdos y guardapiés de lana azules y celestes; hay 5
molinos harineros impulsados por el
agua; 17 de aceite, 2 alfarerías de tiestos bastos; 2
fábricas de jabón; una de armas de fuego; 2
hornos de ladrillo y teja; 3 establecimientos para la elaboración de la sal, que es muy pura y estreñidamente blanca, y los demás oficios y artes mecánicos más indispensables a una pobl., la cual con su térm. municipal, consta de 1,953 vec. 8,397alm. RIQUEZA PROD.: 16 745,833 rs. IMP.: 502,375. IND. y COMERCIAL: 110,000 El PRESUPUESTO MUNICIPAL asciende a 36,000 rs., que se cubren con el producto de almotacenía, que ascienden a 1,000 r s., y lo restante por reparto.
Del abundante y buen esparto o junquillo que produce el pais, se cree haber tomado su nombre esta v.: fué ganada a los moros por los aragoneses, a quienes la quitaron los castellanos, mandados por el infante D. Enrique, conde de Trastamara: ha merecido muy apreciables privilegios de los reyes. Su
escudo de armas, partido, ostenta a un lado dos
escaleras, orlándolo siete cast. y 7 leones, y en la otra parte un sol, cuyos rayos dan en dos cast., y debajo un
león rapante. De entre sus hijos deben citarse el arz. D. Juan Lozano y Lozano, conocido también por sus escritos; el Dr. D. Cristóbal Lozano, autor entre otras obras de cinco novelas sumamente ingeniosas, por no jugar en cada una de ellas más que una vocal. El canónigo D. Juan Lozano y el Excmo. Sr. D. Antonio de Parra.
* Diccionario geográfico - estadístico - histórico de
España y sus posesiones de Ultramar, Pascual Madoz.
Madrid, 1848.