SALIR A TOMAR LA FRESCA
Desvanecido el sopor del duro día, el frescor de la noche era recibido como el mejor postre de la cena veraniega.
La calle Real se llenaba de banquetas y silletes frente a cada fachada, formándose varios grupos de relajada charla saboreando la agradable brisa de la noche; por si el fresco no rea suficiente, las gavillas de centeno remojadas- que servirían a la madrugada para atar los haces de la siega- hacían de cómodas colchonetas a los más pequeños.
Iluminada por dos ... (ver texto completo)
Desvanecido el sopor del duro día, el frescor de la noche era recibido como el mejor postre de la cena veraniega.
La calle Real se llenaba de banquetas y silletes frente a cada fachada, formándose varios grupos de relajada charla saboreando la agradable brisa de la noche; por si el fresco no rea suficiente, las gavillas de centeno remojadas- que servirían a la madrugada para atar los haces de la siega- hacían de cómodas colchonetas a los más pequeños.
Iluminada por dos ... (ver texto completo)
Nacho... qué recuerdos y qué gran memoria.
Lo que me he reido pensando en las gavillas de centeno remojadas y... "el culo mojado" de los más pequeños, porque aunque eso no lo cuentas, tal y como te expresas... debia de ocurrir asi.
Qué bonitas noches a la fresca en todos los barrios, pero sobretodo el vuestro de Inma y tuyo... sería seguramente de los más concurridos por la cantidad de chiquillería.
Precioso relato, sigue así.
Lo que me he reido pensando en las gavillas de centeno remojadas y... "el culo mojado" de los más pequeños, porque aunque eso no lo cuentas, tal y como te expresas... debia de ocurrir asi.
Qué bonitas noches a la fresca en todos los barrios, pero sobretodo el vuestro de Inma y tuyo... sería seguramente de los más concurridos por la cantidad de chiquillería.
Precioso relato, sigue así.